La ópera prima de la directora sueco-lapona Amanda Kernell, Sámi Blood, premiada en Venecia y Tesalónica, ha recibido el mayor galardón cinematográfico en metálico del mundo, el premio Dragón a Mejor Película Nórdica que viene con 1 millón de coronas suecas (104 000 €), en la clausura de la ceremonia del Festival Internacional de Cine de Gotemburgo del 4 de febrero en el Auktionsverket Kulturarena de Gotemburgo.

Ambientada en los años 30, la película trata sobre una criadora renos lapona de 14 años que debe soportar el racismo y los exámenes biológicos en un internado. Comienza a soñar con una vida mejor, pero para conseguirlo debe convertirse en otra persona y romper los lazos con su familia y su cultura.

Sámi Blood, que fue incluida en el focus del festival sobre nuevas producciones realizadas en el área ártica de Sámi (Laponia) en el norte de Suecia, Noruega, Finlandia y Rusia, consiguió el premio Sven Nykvist a Mejor Fotografía para Sophia Olsson. Se estrenará en Suecia el 3 de marzo.

The War Show, el ganador de los Venice Days sobre la Primavera Árabe en Siria vista a través de los ojos y la lente de la locutora de radio Zytoon y sobre cómo la guerra la afectó a ella y a sus amigos, del director danés Andreas Dalsgaard y de la periodista siria Obaidah Zytoon, se ha hecho con el premio Dragón a Mejor Documental Nórdico.

Al final del programa con motivo del 40 aniversario de Gotemburgo, los directores belgas Jean-Pierre y Luc Dardenne recibieron el premio Dragón Honorífico. El premio Dragón Honorífico Nórdico fue concedido a la directora danesa Lone Scherfig, cuya último largometraje sueco-británico Their Finest se llevó a casa el premio del Público a Mejor Película. En último lugar, Beyond Dreams, de la directora sueca Rojda Sekersöz, consiguió el premio a Mejor película nórdica.