Documental transmedia sobre la contaminación en Espinar, Cusco, La vida no vale un cobre, con su formato de nuevas narrativas digitales viene participando en diversos festivales de cine latinoamericano, en septiembre de este año recibió el Premio Mejor nuevo director en el Festival Internacional de Cine y Documental Acampadoc 2018 en Panamá.

El martes 20 de noviembre la productora Hiperactiva Comunicaciones proyectó el documental gratuitamente –previa inscripción- en el Centro Cultural de la Pontificia Universidad Católica, y anuncia que las dos últimas proyecciones se realizarán en Cuba, el martes 27 se proyectará en la Escuela Internacional de Cine y Televisión San Antonio de los Baños, en el marco de Nuevas Miradas EICTV, plataforma de desarrollo de proyectos cinematográficos que congrega a documentalistas y a promotores del mercado cinematográfico de América Latina y Europa, como: Tribeca Film Institute, FICG Industria, IDFA, Sanfic, entre otros.

Como parte de este proyecto, Hiperactiva Comunicaciones anunció que el día de la proyección en Lima (martes 20 de noviembre) se lanzó la campaña “Salud y agua para Espinar”, en busca de visibilizar y sensibilizar a las autoridades peruanas sobre el acceso a dos servicios básicos ausentes en la zona de influencia directa de la mina Glencore, una de las minas más grande de cobre a nivel mundial.

Se sabe que la población de Espinar convive con la actividad minera desde hace 36 años en la zona la exposición de metales pesados superan 33 veces los límites realizados por Censopas, órgano del Ministerio de Salud, han determinado que nueve de cada 10 personas analizada tiene por permitidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), además, dos estudios encima de 10 metales en su cuerpo.

La directora del documental, Maga Zevallos, dice que se busca visibilizar la contaminación ambiental en Espinar y el daño irreversible a fin de que el Estado atienda a la población afectada. “Desde hace 16 años se alerta de la contaminación en la zona mediante monitoreos ambientales. Desde hace ocho años el Estado ha identificado que hay centenares de personas contaminadas. Existe un Plan de Intervención en Salud para la provincia de Espinar, pero no se ha implementado por falta de presupuesto. Estamos frente a un Estado indolente, que no está interviniendo en las zonas extractivas del país a pesar de que las poblaciones claman intervención urgente”, dijo Zevallos.

El documental da un principal protagonismo a las mujeres en sus diversas piezas, como el corto animado La vida no vale un cobre, el cortometraje Pachamama herida, y el teaser del largometraje Melchora y su lucha contra la contaminación minera, se informó a INFOREGIÓN.

La narrativa del documental empieza con un corto animado elaborado por artistas cubanos en base a acuarelas, de 3:54 minutos de duración. A través del recorrido de un río, una campesina de Espinar, Cusco, muestra cómo sus aguas se contaminan debido a la actividad minera. En el camino, ella observa cómo los ganados -que son la principal fuente económica para las poblaciones de la zona- están muriendo, mientras que la actividad minera extrae y lleva camiones repletos de concentrado de cobre, dejando a su paso pobreza y contaminación.