La Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano (fnCl) lamenta el fallecimiento del cineasta colombiano Carlos Álvarez, ocurrida el 7 de julio a los 76 años de edad, miembro fundador y de su Consejo Superior. Destacado criticó, investigador y en especial documentalista, Álvarez fue miembro del Comité de Cineastas de América Latina participó en la Primera Muestra de Cine Documental Latinoamericano, celebrada en Mérida, Venezuela, y en la 4ª Muestra del Nuevo Cine en Pésaro, Italia, en 1968.

Durante su estancia en Argentina entre 1962 y 1964, fue discípulo del  gran cineasta y artista argentino Fernando Birri, uno de los más sobresalientes fundadores del Movimiento del Nuevo Cine Latinoamericano, y creador de la Escuela de Cine Documental de Santa Fe.

Destacan sus estudios sobre el cine colombiano y latinoamericano en periódicos y revistas especializadas como Guiones y Cinemés y Cuadro, donde público en 1978 su manifiesto "El tercer cine colombiano", un texto escrito en 1975. Su libro Sobre cine colombiano y latinoamericano fue editado por La Universidad Nacional de Colombia en 1988. Su investigación "El cortometraje de sobreprecio" (datos 1970-1980) realizada en la Cinemateca Distrital en 1982, fue complementada luego de su censura con "Una década de cortometraje colombiano 1970-1980".

Su labor docente incluyó  su participación en la creación de la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV) de San Antonio de los Baños en Cuba. En 1988, creó la Escuela de Cine y Televisión de la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Colombia. Fue decano de la Facultad de Producción de Cine y Televisión de la Corporación Universitaria Nueva Colombia, y trabajó en el programa de Cine y Televisión de la Universidad Agustiniana.

Cineasta y documentalista en toda la extensión de la palabra, ya que asumió a menudo el guion, la fotografía, la cámara, el montaje o la producción de sus filmes, realizados dentro del género documental: Antioquia en marcha (1967); Asalto (1968), Colombia 70 (1970), ¿Qué es la democracia? (1971), Con Los hijos del subdesarrollo (1975) e Introducción a Camilo (1978), galardonado internacionalmente. Sobresalió además su trabajo como fotógrafo y editor de documentales de otros directores.

El blog Pajarera del Medio reeditó su texto “El tercer cine colombiano”, con motivo de su muerte y afirma: “Carlos Álvarez desplegó, antes y en paralelo a su trabajo fílmico, una escritura combativa e intensa que le permitió exponer y defender posiciones (…) Sus artículos, indispensables para recuperar y establecer la tradición crítica del cine en Colombia, tienen el aliento de los manifiestos y son fundamentales para situar las discusiones de los años sesentas y setentas”.

Por su parte la Cinemateca de Cuba afirma en el blog CineReverso: “En sus producciones afloró el empeñó en hacer pensar a los espectadores para contribuir a formar un lector audiovisual lúcido y comprometido. Carlos Álvarez fue un cineasta crítico con el poder, las injusticias sociales y políticas implementadas en Colombia".