A varias semanas de su anunciado y pospuesto estreno por falta de pantalla, la semana pasada llegó a salas de Buenos Aires el filme El destino, del realizador jujeño Miguel Pereira.
Después de aquel suceso que el cineasta consideró "un baldazo de agua fría" y también "un perjuicio para nuestro cine", Pereyra, que sí logró estrenar su nuevo filme en salas de Jujuy el 21 de junio, ahora desembarcó en cines de Buenos Aires.
"Lo que más me movilizó de la novela es el cuestionamiento implícito que plantea sobre la identidad, donde abre el interrogante sobre cuál es la identidad de una persona si lo que ella cree que es o lo que piensa la gente", indicó Pereyra.
"En la novela un forastero llega a un pueblo y allí lo confunden con un sacerdote al que estaban esperando, en definitiva es como que el pueblo ve lo que quiere ver", resaltó el realizador que no siguió el texto de Tizón al pie de la letra sino que lo utilizó como punto de partida.
En el relato cinematográfico de Pereira, un narcotraficante español de poca monta llega a un pueblo perdido en la Puna luego de una serie de avatares, en momentos en que la gente del lugar se debate entre continuar con su histórico trabajo de artesanías de barro o si acepta la apertura de una ruta.
"Yo tomé esta cuestión -señaló- y la amplié al tema de la identidad cultural, poniendo en discusión cuál es la identidad cultural de un pueblo ante el avance de la globalización".
Quien por cinco años fuera presidente del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, apuntó que el filme "plantea una historia circular".
"Vincula -sostuvo- la de los primeros colonizadores y la de una nueva vuelta, en la década del 90, cuando los españoles vinieron por las empresas públicas y las riquezas naturales, pero también habla de la identidad cultural como un modo de resistencia".
Protagonizada por el español Tristán Ulloa ("Lucía y el sexo"), Carolina Román, Mimí Ardú, Tukuta Gordillo y Tomás Lipán, la película fue rodada íntegramente en escenarios naturales de la provincia de Jujuy como La Quiaca, Yavi, Purmamarca, Uquía y San Salvador.
Desde su terminación, El destino recorrió numerosos festivales internacionales, entre ellos los de Karlovy Vary, Pusán, Sevilla, Franckfurt y Roma.