Lisandro Rodríguez, Vanina Montes y Andrea Strenitz encabezan el reparto de esta modesta y disfrutable película de la realizadora chilena, egresada de un Máster de Dirección en la ESCAC de Cataluña, Dominga Sotomayor (De jueves a domingo). Mar fue rodada en la localidad atlántica de Villa Gesell con actores argentinos, y cuenta la llegada desde la capital de una pareja de treintañeros que acuden para tomarse unas cortas vacaciones.

Martín viaja hacia la playa con su novia en el coche de su madre sin saber que ella no dejó los papeles dentro del auto. La relación de ambos está en ese punto muerto bastante típico de su edad y por eso los días del verano pasan perezosamente en el albergue y en la playa.

Cuando la madre de Martín llega con los documentos olvidados, se rompe la intimidad de la pareja, y la fragilidad del hijo frente a la madre queda expuesta sin remedio posible, quedándose él atascado entre los roles de hijo y de hombre en el medio de las dos mujeres. Igualmente la madre esconde el verdadero propósito de su visita, que se conocerá más adelante.

Es muy remarcable en este caso la capacidad de reacción y de adaptación que Dominga Sotomayor y los actores tuvieron frente a un hecho fortuito y grave ocurrido en esa población costera argentina. De un total de 8 días de rodaje -en una producción sencilla y entre amigos de buena onda-, a lo largo de la sexta jornada, la meteorología causó estragos al caer un rayo en la playa que mató a tres adolescentes. En lugar de parar el rodaje, el equipo decidió en conjunto continuarlo e incorporar ese trágico suceso real al desarrollo de la trama, pero en forma de elipsis y responsablemente distanciado para no ahondar en el profundo dolor de los familiares de esos chicos, como corresponde a unos profesionales que lo que quieren es hacer cine y actuar defendiendo la ética por encima de todo.

Tal vez Mar habría sido un mediometraje de no ser por ese imprevisto que cambió el curso del relato, añadiendo en consecuencia más minutos a la película, lo que la convierten en un largometraje. Entre los temas que trata el film se encuentra la maternidad, las aseguradoras, la familia, las rutinas de la pareja o la influencia de la televisión. El final es algo simbólico y parece estar recordándonos que cuando te conectas con ciertas cosas, dejas de conectarte a otras. Interesante historia que incide en uno de los momentos, por vacaciones y por edad, que pueden resultar más críticos en una pareja.