La hija de todas las rabias, una coproducción de Nicaragua, México, Holanda, Francia y Alemania dirigida por la cineasta nicaragüense Laura Baumeister, obtuvo tres premios del cada vez más amplio apartado de Industria del Festival de San Sebastián, cuya 67ª edición finalizó el sábado 28 de septiembre.

Entre ellos, la película se ha alzado con el Premio EFADs-CAACI de Coproducción Europa-América Latina, concedido conjuntamente por la Asociación Europea de Directores de Agencias de Cine (EFADs por sus siglas en inglés) y la Conferencia de Autoridades Audiovisuales y Cinematográficas de Iberoamérica (CAACI).

Los otros dos premios obtenidos por La hija de todas las rabias en el festival donostiarra son: el Premio al Mejor Proyecto del VIII Foro de Coproducción Europa-América Latina y el Artekino International Prize.

La película narra la historia de María, una niña de once años que vive en un inmenso basurero de la capital nicaragüense. Para ella, el lugar es como un parque de diversiones donde inventa juegos con cada cosa que encuentra. Tras envenenar accidentalmente a los cachorros que su madre estaba criando para vender, a la niña la llevan a una fábrica de reciclaje para que “aprenda a trabajar”.

Es, como dice Baumeister, “una película sobre la resiliencia” que muchos latinoamericanos están obligados a desarrollar para salir adelante en la dura realidad de sus países. En este caso, tratándose de una niña, una resiliencia que consiste básicamente en “recurrir a tu fuerza interior, a tu mundo fantástico”.

La hija de todas las rabias es una producción de Felipa Films y Mart Films junto con Halal, Promenades Films y Heimat Film.

La visibilidad internacional que da el festival donostiarra, y en especial los premios que otorga la Industria (como el EFADs-CAACI de Coproducción Europa-América Latina), contribuirán a que La hija de todas las rabias reúna los fondos internacionales suficientes para que más temprano que tarde podamos ver la película estrenada en muchos países.