A partir del largometraje de ficción La isla (1979), con guión de la célebre Aida Bortnik, Alejandro Doria conoció un periodo, de una década, colmado de premios, reconocimientos a todos los niveles y popularidad. Antes, había realizado Años infames (1974) y Contragolpe (1978), y esta primera etapa trasluce ya su preocupación por retratar al argentino contemporáneo, con riqueza anecdótica y numerosos guiños que apelan a la comunicación más amplia, sin desdeñar los dramas sociales, el humor, el melodrama, de acuerdo con su formación ecléctica como periodista y realizador de televisión.
Basada en una idea de la actriz China Zorrilla, quien además desempeña uno de los principales papeles, Darse cuenta (1984) lleva guión escrito por el director junto a Jacobo Langsner, fotografía de Miguel Rodríguez, música del cubano Silvio Rodríguez, y formidables interpretaciones de Luis Brandoni, Luisina Brando, Dora Baret y el entonces novel Darío Grandinetti. Un médico se dedica con inusual ahínco a la salvación de un joven desahuciado, tal vez porque el galeno ha fracasado en muchos otros aspectos de su vida. En un clima de opresión e insolidaridad, Darse cuenta fue un soplo de optimismo.
Del drama del desaliento a la comedia satírica de costumbres y de humor negro, Doria vuelve a trabajar con Langsner, a partir de una obra de teatro de este último. Esperando la carroza (1985) convoca un estelar elenco (Antonio Gasalla, China Zorrilla, Luis Brandoni, Julio de Grazia, Betiana Blum) en una reflexión sobre la vejez, las apariencias e hipocresías, la falsa piedad y las relaciones filiales pequeño burguesas. Fue el éxito taquillero del año, y se convirtió en una especie de mito en las respectivas carreras de sus implicados.
Sofía (1986) es la última de las buenas películas dirigidas por Doria en la etapa de los años ochenta. Cuenta la relación amorosa de un joven de 17 años y familia conservadora con una mujer de 36, comprometida con la lucha izquierdista. Se apoya nuevamente en un sólido guión coescrito por el director y por Jacobo Langsner, con fotografía del también repitente Miguel Rodríguez, quien aportó el argumento.
Posteriormente, Doria entregó filmes medianos, correctos, pero sin la inspiración, o la inventiva dramatúrgica de sus tiempos de gloria Cien veces no debo (1989) y Miss Tango (1990) figuran entre ellos.
Con el ciclo televisivo Atreverse recibió varios premios Martín Fierro (entre ellos Mejor Director y Mejor Programa, en dos entregas consecutivas).
Además de premios nacionales, recibió numerosos galardones internacionales como el Premio al Mejor Programa de Ficción Hispano parlante, y otros premios en los festivales de Huelva y Biarritz.
También dirigió en televisión la remake de El Rafa en 1997, con las actuaciones de Arturo Puig, Gastón Pauls y Paola Krum, y con libros de Alberto Migré.
Últimamente había recibido numerosos premios por su película Las Manos, que retrataba la vida del padre Mario Pantaleo.
A los 72 años, el reconocido director y guionista falleció el 17 de junio de 2009 en Buenos Aires como consecuencia de una neumonía crónica, que deterioró marcadamente su salud durante sus últimas semanas de vida.
Born in Buenos (1936-) was born in Buenos Aires, Argentina. He first worked for Argentine television in 1965 as a writer for a local variety show, Show rambler. He first directed professionally for Adorable Professor Aldao, a 1968 romantic comedy series. Doria's contract to direct the 1969 season of a top-rated sitcom, Nuestra galleguita (Our Galician Girl), secured his career in Argentine television, and he directed numerous series during the early 1970s and was a guest producer for Alta comedia (a comedy showcase) several times.
Doria first directed for the cinema in 1974. The political satire by José Dominiani, Proceso a la infamia (Infamy on Trial), ran afoul of the newly-appointed National Film Rater, Miguel Paulino Tato, however. Unable to work professionally for four years, Doria obtained his film's release in 1978, though the new, heavily-edited version was panned by its audiences and director, alike. In demand following his long absence, Doria directed two thrillers in 1979: a film adaptation of Marco Denevi's Contragolpe (Retribution), and of Aída Bortnik's La isla. Collaborating with Bortnik on La isla screenplay, the psychological thriller earned Doria a special mention at the Montreal World Film Festival. He wrote and directed one of the few well-known horror titles in Argentine film, Los miedos (Fears), in 1980, and in 1982, directed a film adaptation of Silvina Bullrich's best-selling Los pasajeros del jardín (Wanderers in the Garden) - Bullrich's nostalgic, autobiographical look at her happy and all-too-brief second marriage.
The return of democracy in Argentina in 1983 was accompanied by a revival in local film and theater production. Doria and Uruguayan screenwriter Jacobo Langsner wrote a script based on a concept created by another Uruguayan artist, veteran leading lady China Zorrilla. Their drama, Darse cuenta (Realization), was a critical and commercial success in 1984.
Alejandro Doria and Langsner were then reunited for the making of Esperando la carroza (Waiting for the Hearse). The 1985 black comedy looked at a typical Argentine family and their struggles with each other and their mischievous, nonagenarian matriarch. The film became a cult classic, though another director's sequel written by Langsner and released in 2009 was unsuccessful.
Doria and Langsner then turned to recent history in Argentina with Sofia. The 1987 tragedy dealt with a chance encounter and a May-December love affair amid the oppressive Dirty War against dissidents. The harrowing portrayal, however, received little notice. Doria returned to the family comedy genre in 1990 with Cien veces no debo (I Don't Owe 100 Times Over) - a comedy of errors revolving around bad news for a neurotic, middle-class family. Doria then returned to television, directing a number of soap operas and a segment in an episodic homage to the victims of the 1994 AMIA bombing (the worst terrorist attack in Argentine history).
His reputation as a leading filmmaker in Argentine cinema was restored with the 2006 release of Las manos (The Hands) a bio-pic on the life of Father Mario Pantaleo, an Argentine priest who incurred the Vatican's wrath following reports he possessed healing hands. The drama earned numerous prizes in Argentina and in prestigious international film festivals, notably the Huelva Latin American Film Festival and Cartagena Film Festival. Doria more recently directed Doce horas (12 Hours) and Tuya (Yours), titles scheduled for release in 2010 but a pneumonia cost the filmmaker his life on June 17, 2009, at age 72.