Ramón tiene 45 años, está casado con Nora, su primer y único amor. Tienen dos hijos, Andrés de 13 y Paloma de seis. Ellos viven en los suburbios de Buenos Aires. Cierra la fábrica donde él trabaja desde hace diez años, comienza así un camino de descenso al infierno. Todos sus puntos de apoyo se van desmoronando. Nora por primera vez debe salir a trabajar de doméstica, deben vender la casita y volver a la villa. Andrés, el hijo mayor, se inserta en la vida marginal hasta ser detenido por la policía. Frente al deterioro Ramón comienza a soñar con el regreso al pasado: el campo.
Algunos premios y distinciones:
1990, Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, Edición 16º, Largometraje, Colón de Oro del Jurado al Mejor LargometrajeFondo(s) de la Biblioteca Digital asociados a esta película:
Después de la tormenta (recorte)