Nació en Santiago de Cuba, el 29 de septiembre de 1941. Su carrera artística comienza en 1954, actuando en radioemisoras de su provincia. En 1956 se traslada a La Habana y se vincula también a la radio y la televisión . Debuta en el teatro en 1957, con la obra Pájaros de la luna de Marcel Aymée. A lo largo de su carrera siempre estuvo vinculado al medio teatral. Inicialmente actuó en salas privadas, hasta que en 1959, se incorpora al Teatro Nacional de Cuba. Formó parte del Conjunto Dramático Nacional y posteriormente de la compañía Teatro Estudio, a la que perteneció durante varios años. En 1966 hace pareja con Adela Legrá en el mediometraje Manuela, de Humberto Solás. Empezaba así una exitosa carrera como actor en el cine en la que trabajó bajo las órdenes de los más prestigiosos realizadores del ICAIC.
Hizo el personaje del machista por antonomasia del cine cubano junto a Daisy Granados en Retrato de Teresa, y en el tercer cuento de Lucía. Mucho dió que hablar su trabajo en Lucía, filmada en 1968. Entonces algunos llegaron a afirmar que el temperamento celoso y violento de su personaje se ajustaba al carácter histórico "macho" cubano.
Paralelamente, desarrolló una amplia labor pedagógica. Insistió siempre en la formación y estimulación de los jóvenes intérpretes. Entre 1989 y 1996, apoya a los estudiantes de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de Cuba en la dirección de actores. En 1996, imparte un taller de actuación para adultos aficionados. En 1998 crea en su casa el Taller de Actuación "La Terraza" con el propósito de preparar niños y adolescentes para presentarse a las pruebas de ingreso en escuelas de arte (ENA - ISA – Instructores de Arte). En 2001, empezando su 5º año, el Taller continúa su trabajo, ahora con el nombre de "La Terraza - Adolfo Llauradó".
En sus últimos tiempos actuó en diversos cortometrajes producidos por alumnos de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de Cuba en San Antonio de los Baños, y dirigió tres documentales: Carilda, desaparece el polvo; Divas, y Esmeralda. Participó en festivales internacionales de cine en España, Moscú, Francia, Brasil y de Teatro en La Habana, Camagüey, España y Yugoslavia, entre otros. Falleció el 3 de noviembre de 2001, en la Habana, su cuerpo fue trasladado y enterrado en su ciudad natal Santiago de Cuba. Su muerte lo sorprendió en una plena etapa de fecundidad creativa. Se preparaba para ser el protagonista de un filme de Pastor Vega, Resurrección. En Marzo de 2003 fue inaugurada en La Habana la Sala Teatro Adolfo Llauradó, en reconocimiento a su obra y a su indiscutible presencia en la cultura cubana.