Nacido en Santiago de Compostela, España, José Enrique Pintor vive hace más de 15 años en Santo Domingo, ciudad que ha adoptado como centro de desarrollo de su creatividad: ha trabajado en programas de radio y televisión, ha hecho música, y además de haberse convertido en uno de los realizadores de más éxito en taquilla en Dominicana, pinta y escribe.
Viajó al país caribeño para fundar una empresa de doblaje de películas, que funcionó durante tres años. Desde entonces ha trabajado mayormente en televisión, como productor de varios programas, como Operación Hispaniola y La casa de cristal.
En 2004 presentó su ópera prima, La cárcel de la victoria, el cuarto hombre, película muy taquillera, aunque menos que su reciente Sanky Panky, estrenada en 2007, que ha roto todos los récords de taquilla de la historia del cine dominicano.
Pintor ha comentado que tiene el proyecto de hacer un nuevo filme cuyo argumento recoge la historia del asalto al Banco del Progreso, ocurrido en 1993.
He was born in Santiago de Compostela, Spain, but he has lived for more than 15 years in Santo Domingo, a city he has chosen to be the development center of his creative work. He has worked in radio and television programs. In addition to become one of the most successful directors at the Dominican box office, he also writes, draws and composes music. He first traveled to the Caribbean country to found a film dubbings company, in which he worked for three years. Since that time, he has worked mostly for television as producer of some shows as Operación Hispaniola and La casa de cristal.
In 2004, was released Pintor´s debut film La cárcel de la victoria, el cuarto hombre, which was very successful at the box office, but not as much as his next feature film Sanky Panky, released in 2007, which broke all box office records in the history of the Dominican cinema.
Pintor has talked about his project to direct a new film with a plot based on the the assault to the Progreso Bank that took placed in 1993.
“Nuestro objetivo final es nada menos que lograr la integración del cine latinoamericano.
Así de simple, y así de desmesurado”.
