Nació en Rosario, el 13 de marzo de 1963. El destacado cantautor argentino ha tenido algunas experiencias en el cine, desde que en 1992, a partir del éxito de su disco El amor después del amor dirige el mediometraje La balada de Donna Helena, de 32 minutos y protagonizado por Cecilia Roth y Eusebio Poncela. Años después, en 1997, coprodujo el filme Martín (Hache), de Adolfo Aristarain.
En 2001 debuta con su primer largometraje como director de cine, Vidas privadas. El guión (escrito por él, en colaboración con Alan Pauls) trata sobre la última dictadura militar argentina. La película engarza el mito edípico con el robo de menores, los desaparecidos y la tortura durante la última dictadura militar, en un relato que fluctúa entre la tragedia y el melodrama. La película tuvo escasa recaudación y críticas por lo general desfavorables.
"Lo que me interesaba explotar era cómo un horror como un genocidio podía dar lugar a un encuentro de esta naturaleza y, a la vez, pensarlo al revés, cómo insertar el mito edípico, con sus consecuentes ideas de destino y fatalidad, dentro de la historia argentina", comentó Páez. El realizador agregó que con Vidas privadas quería transmitir "el sentimiento de fragilidad y abandono al que te somete una tragedia, algo muy personal que tenía guardado y que al mismo tiempo se encuadra dentro del marco político de la historia argentina". El largometraje, que Páez comenzó a pensar en 1994, tuvo dos intentos fallidos de realización y perdió a sus dos principales productores en la primera semana de rodaje.
Páez reconoció tener influencias de los realizadores argentinos Leopoldo Torre Nilson y Adolfo Aristarain, además del escritor Manuel Puig, en su modo de encarar el trabajo autoral y cinematográfico.
Desde mediados de 2006, su tercer proyecto cinematográfico como director se encuentra en etapa de postproducción, y se trata de una comedia de enredos titulada ¿De quién es el portaligas?
Filmografía
1993 La balada de Donna Helena (mediometraje, director)
2001 Vidas privadas (director y guionista)
Fito Paez (born in Rosario, on March 13th, 1963), the outstanding Argentine songwriter, has had some experience in cinema since 1992. After the success of his album El amor después del amor he directed the film La balada de Donna Helena, with a length of 32 minutes and starring Cecilia Roth and Eusebio Poncela. Years later, in 1997, Paez co-produced the film Martín (Hache), by Adolfo Aristarain.
In 2001, he debuted with his first long feature film as director, Vidas privadas. The script (written by him, in collaboration with Alan Pauls) is about the last military dictatorship in Argentina. The film combines the oedipal myth with the theft of children, the disappearances and the tortures during the military dictatorship, in a story that fluctuates between tragedy and melodrama. The film reached poor economic results in terms of box office receipts and had unfavorable critics in general.
"What interested me was to show how such a horror as genocide could lead to an encounter of this nature and, at the same time I wanted to think about it in the opposite way. I wanted to insert the oedipal myth, with its consequent ideas of destiny and fatality, within the Argentine history", said Paez. The director added that Vidas privadas wanted to convey "the feelings of vulnerability and abandonment in which a tragedy can submit you, something very personal that I had saved and at the same time it fitted within the political framework of Argentina's history." The feature film, that Paez began to think about in 1994, had two failed attempts of production and lost its two major producers in the first week of shooting.
Paez admitted that his way to face the author and film work is influenced by the Argentine filmmakers Leopoldo Torre Nilson and Adolfo Aristaraín, by the writer Manuel Puig.
Since the mid-2006, his third film project as director is in post-production. It is a comedy entitled ¿De quién es el portaligas?
“Nuestro objetivo final es nada menos que lograr la integración del cine latinoamericano.
Así de simple, y así de desmesurado”.
