Y fue así como una mañana de julio, Solimán, un joven palestino, y Jacob, su amigo judío, comenzaron a construir una casa en Beit-Sajour, en las colinas de Judea, con piedras traídas de Beit-Yala. Mientras, la aparente quietud del lugar es interrumpida por ráfagas de violencia que anticipan los futuros días de la guerra.
And so it was a July morning when Solimán, a Palestinian boy, and Jacob, his Jewish friend, began to build a house in Beit-Sajour, in the hills of Judea, with stones brought from Beit-Yala. Meanwhile, the apparent stillness of the place is interrupted by bursts of violence that anticipate the future days of war.