Festivales y muestras (creación de la Red o redes latinoamericanas de festivales y muestras).

Uno de los indicadores del auge del género documental en la región es el inusitado crecimiento de festivales y muestras que se han dado en la última década.

El primer efecto de la realización festivales y muestras documentales es la creación de nuevos públicos, y el acceso de este a una diversidad de estilos, a más de la creación de un interés naciente por parte de la opinión pública general. En ese sentido, los festivales han visibilizado a la enorme gama de creaciones en el género. Pese a estos enormes progresos, queda pendiente el acceso a públicos más específicos como el infantil o el de las amas de casa.

La diversidad de temas ha permitido la especialización temática de ciertos festivales, dedicados, por ejemplo, a los derechos humanos o a las producciones comunitarias. Simultáneamente, este reconocimiento público se ha reforzado con una serie de publicaciones impresas como catálogos, revistas, libros y otra serie de publicaciones especializadas. Adicionalmente, la programación de festivales posibilita la creación de otros recursos de acceso documental, como lo son las bibliotecas audiovisuales. El «Banco de Documentales de América Latina», una iniciativa que cuenta con el apoyo del Ministerio de Cultura de Brasil y Red Televisión de América Latina (TAL) y ha empezado a explorar los materiales existentes en América Latina, producidos por televisoras públicas, por documentalistas, por escuelas de cine, los mejores trabajos de los estudiantes. Este banco, que cuenta hoy con 3000 horas de material, 1200 en idioma portugués, y unas 1800 horas en español.

La organización de festivales y muestras es una nueva forma de encuentro de la comunidad documental integrada por realizadores, productores, técnicos, trabajadores, compañías, asociaciones gremiales y colectivos de profesionales, distribuidores, autoridades públicas nacionales y regionales, canales de televisión y plataformas de difusión, periodistas, críticos e investigadores, universidades e institutos de educación.

La existencia de esta red ha posibilitado una naciente estructura informal de mercado documental con actividades de consultoría en temas de fondos y concursos, financiamiento, desarrollo, co-producción, distribución y colaboración a nivel internacional. Algunos festivales tienen su propio mercado de películas, en donde los programadores (también llamados edit commisioners) y las compañías de distribución pueden tener acceso a la más reciente oferta documental, a través de reuniones de negocios con compañías productoras y distribuidoras, y a partir de visionajes en bibliotecas y cabinas de video, depositarias de la oferta más recientes producciones.

Otros festivales han desarrollado laboratorios de pre-producción en dónde productores y realizadores desarrollan actividades de capacitación y mercadeo, mayormente enfocadas a los temas de producción y distribución. En los laboratorios se presentan los proyectos participantes —generalmente centrados en un esquema de pitch— no sólo a especialistas a posibles co-productores, distribuidores y programadores de festivales y canales de televisión. Los laboratorios más competitivos han establecido estímulos para los proyectos participantes que pueden incluir premios económicos, y compras adelantadas de cadenas de televisión. En el contexto regional de los mercados de documental han sido importantes las participaciones de las televisiones públicas como TELESUR, la Red Televisión de América Latina (TAL), la Televisión Española, el Programa de Fomento a la Producción y Teledifusión del Documental Iberoamericano – DOCTV IB, la Asociación Internacional de Documentalistas (IDA), la Red de Europea del Documental (EDN), el Fondo Jan Vrijman y el Festival de Documentales de Ámsterdam (IDFA).

Una de las formas más recientes de colaboración internacional es la alianza del foro DocBsAs (Buenos Aires, Argentina) y el festival Sunny Side of the Doc (La Rochelle, Francia), uno de los puntos de encuentro más importantes de Europa del mundo documental. Otra referencia interesante es el Festival Luso-Brasileiro de Santa Maria Feria (Portugal), evento cinematográfico que, desde la integración lingüística, ha unido por más de una década a la producción en lengua portuguesa de América y Europa.