Licenciado en Artes Escénicas en el Instituto Superior de Arte de Cuba, y de la especialidad de Dirección en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños, Arturo Sotto se cuenta entre los jóvenes cineastas que representaban la posibilidad del relevo, en los años noventa, para recobrar el esplendor del cine cubano.
Desde el principio su obra manifestó fuerte inclinación a lo experimental, con el corto Talco para lo negro (1992), uno de los títulos significativos, y raros, en el cine cubano, por su estilo provocativo y chocante, distanciado de las convenciones narrativas.
Su debut en la ficción, Pon tu pensamiento en mí (1995), representaba una modalidad de cine muy pocas veces realizada en Cuba, muy afín con el cine de autor a la europea, y de gran complejidad narrativa y temática. Un actor sobre un escenario hace aparentes milagros. El pueblo dice que es el nuevo Cristo, él lo niega. El pueblo necesita algo en qué creer. Y tal vez sea ese el gran tema del filme: escrutar el origen de los mitos de tipo político, religioso y culturales.
En Amor vertical (1997), una polémica comedia de fuertes tintes eróticos y críticos sobre la situación de la vivienda, Sotto consiguió una película más relajada y abierta a la comunicación con el gran público.
Después de un receso bastante largo, Sotto se unió al actor Jorge Perugorría en la realización del documental musical Habana abierta (2003) en el cual se registra la memorable actuación del famoso conjunto musical cubano. En 2007 estrenó su nuevo largometraje de ficción La noche de los inocentes.
En 2008 realiza el documental Bretón es un bebé, una coproducción del ICAIC y la Red de Televisión de América Latina (TAL).
Dos proyectos del director fueron seleccionados en el primer Encuentros Cinergia en el 2013: Perdidos en el cielo (en la categoría de Proyectos en desarrollo, ficción) y Boccaccerías habaneras (en la categoría Work in Progress, ficción).
Graduated from the International School of Film and Television of San Antonio de los Baños, as a film director, Arturo Sotto is among the young filmmakers who represented the possibility of relief, to regain the glory of Cuban cinema in the nineties.
From the beginning his work expressed strong inclination toward the experimental, with the short film Talco para lo negro (1992), a rare and significant movie in Cuban cinema, for his provocative and shocking style, distanced from some narrative conventions.
His debut in feature films, Pon tu pensamiento en mí (1995) represented a form of cinema rarely done in Cuba, very akin to European cinema de auteur, and with a great narrative and thematic complexity. An actor on a stage made apparent miracles. The people said he’s the new Jesus Christ but he denies it. The people need something to believe in. And perhaps that is the great theme of the film: to scrutinize the origin of political, religious and cultural myths.
In Amor vertical (1997), an erotic comedy with a strong and critical argument on the housing situation, Sotto made a more relaxed movie, much more open to communicate with the audience.
After a quiet long break, Sotto joined the actor Jorge Perugorria in the documentary musical Habana abierta (2003) in which he records the memorable performance of the famous Cuban band. In 2007 he premieres his new feature film La noche de los inocentes.
Web: www.cubacine.cu/realizad/asoto.html