FICHA ANALÍTICA
Noticiero
Río Fuentes, Joel del (1963 - )
Título: Noticiero
Autor(es): Joel del Río Fuentes
Fuente: Revista Cine Cubano On Line
Número: 13
Año de publicación: 2009
El Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos arriba a su primer medio siglo, por cuya conmemoración, se trazó un ambicioso programa de actividades y eventos que, comenzando por estrenos de su más reciente producción, se propone el recuento, el análisis y el homenaje merecido. En el primer trimestre del año se estrenaron cinco filmes: Omertà, El cuerno de la abundancia, Los dioses rotos, Ciudad en rojo y La anunciación. El 24 de marzo, fecha de su fundación, se llevó a cabo en el teatro Karl Marx la gala conmemorativa por el 50 aniversario, presidido por el General de Ejército y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Raúl Castro, quien condecoró a Alfredo Guevara con la Orden «José Martí», en cumplimiento de un acuerdo del Consejo de Estado. Además, entregó un diploma de reconocimiento al ICAIC con motivo de tan significativa ocasión. Las palabras centrales del acto, que inician esta Revista, estuvieron a cargo de Abel Prieto, miembro del Buró Político y ministro de Cultura. Abel, en compañía de Omar González, presidente del ICAIC, entregó diplomas por su condición de fundadores, a 23 destacados artistas, técnicos, especialistas y trabajadores que, encabezados por el realizador Julio García-Espinosa, los recibieron en representación de un grupo más numeroso a quienes se les entregará posteriormente. El cierre de la gala lo constituyó el estreno del largometraje Ciudad en rojo, de la realizadora Rebeca Chávez, inspirado en la novela Bertillón 166, de José Soler Puig.
Desde el 15 de diciembre y hasta el 30 de marzo se desarrolló en el cine Charles Chaplin el ciclo «Historia de nuestro cine contada en imágenes», organizado por la Cinemateca de Cuba, que constituye un recorrido por lo más representativo del cine nacional, desde el silente hasta la actualidad. Asimismo, se ha estado desarrollando el programa de conferencias «Cine y Revolución», desde el 4 de marzo y hasta el 6 de mayo, referidas a aspectos fundamentales del cine cubano en los 50 años de la Revolución, especialmente, lo producido por el ICAIC.
Los días 16, 17 y 18 de febrero, en el cine 23 y 12, el ensayista, narrador y antropólogo argentino Adolfo Colombres impartió el seminario «El bosque simbólico: acercamiento a una antropología del arte, el cine y la literatura», destinado a profesionales, investigadores, estudiantes de carreras de letras y amantes del tema en general. Se ofreció en tres módulos: «El hombre como animal simbólico», que analizaba los mitos y los ritos como fundamento de la cultura; «La construcción de significados en las artes de la representación y el documental antropológico», relativo a Flaherty, Dziga Vertov, Jean Rouch y el Cinema-Verité, y «La construcción de significados en la narración oral».
El primer día de febrero, en tandas sucesivas del cine Charles Chaplin, se proyectaron La muerte de un burócrata, de Tomás Gutiérrez Alea; Rancheador, de Sergio Giral; y Jíbaro, de Daniel Díaz Torres, tres cintas que conforman el homenaje del ICAIC a Salvador Wood, quien recientemente arribó a los ochenta años de edad. También se dedicaron varias exhibiciones a la memoria de Héctor García Mesa, director de la Cinemateca durante muchos años e inspirador de la política cultural de esa institución. Dos películas en las que intervino como guionista –El joven rebelde, de Julio García-Espinosa; y La salación, de Manuel Octavio Gómez– fueron exhibidas junto a varios materiales del Noticiero ICAIC Latinoamericano recientemente restaurados. Paralelamente, en la sala de video Charlot se pudieron ver clásicos preferidos por García Mesa que formaron parte de memorables ciclos organizados por aquella Cinemateca que consiguió erigirse en epicentro de arte y cultura en la capital cubana: La quimera del oro, de Charles Chaplin; El gabinete del doctor Caligari, de Robert Wiene; y Algunos prefieren quemarse, de Billy Wilder. Pastor Vega fue recordado el 12 de febrero con la proyección de Vidas paralelas, Las profecías de Amanda y Retrato de Teresa, que cumple este año los veinte de su realización, y de haber despertado una de las más grandes polémicas de índole sociológica nunca provocadas por una película cubana.
En Caracas, tuvo lugar, en noviembre de 2008, el I Encuentro de Documentalistas Latinoamericanos del Siglo xxi, que contó con la presencia de cineastas de 19 países de la región y autoridades de diversos organismos nacionales del cine latinoamericano. A lo largo de cuatro días se efectuaron debates en mesas de trabajo y conferencias magistrales, a las que se sumaron proyecciones de documentales de los presentados en Mérida, Venezuela, en 1968, en lo que fue la Primera Muestra de Cine Documental Latinoamericano, y que marcó un hito en la historia del audiovisual del continente. La reunión de cineastas estuvo orientada particularmente a la promoción del cine documental, y a la indagación de nuevos métodos para establecer nexos de trabajo en el área continental entre las diferentes generaciones de documentalistas y originar así nuevas plazas para la producción, intercambio y difusión de piezas audiovisuales. El encuentro concluyó con la declaración más representativa, hasta el momento, sobre la problemática actual del cine latinoamericano. Omar González, presidente del ICAIC, se cuenta entre los firmantes de un acta en la cual se aboga por una producción cultural y audiovisual con valores históricos, por reforzar las cinematografías nacionales y regionales, y lograr un audiovisual latinoamericano creativo e identitario. Con el Encuentro se busca impulsar políticas de Estado en los países de la región de apoyo al audiovisual entendido en su acepción cultural y artística.
Con la exhibición de Por primera vez y Hombres sobre cubierta abrió el 8 de enero una muestra de cine cubano en Argentina, en homenaje al aniversario 50 del triunfo de la Revolución. Durante el ciclo, se proyectaron 15 largometrajes y nueve documentales del ICAIC, una institución que según Omar González, «protegió el cine nacional y formó un público leal a su cine, a la diversidad cultural y a la cinematografía latinoamericana». El titular del Instituto de cine cubano agradeció el empeño del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) de Argentina por realizar la más grande muestra cubana exhibida en la geografía trasandina. Por su parte, Liliana Mazure, presidente del INCAA, anunció que la serie recorrería casi todo el país. La muestra cubana abarcó desde Historias de la Revolución, de 1960, hasta Kangamba, estreno cubano de 2008. La muerte de un burócrata fue elegida para la clausura con su exhibición en el cine teatro Ateneo de Buenos Aires, y así culminó el programa que llegó a 20 ciudades de nueve provincias, y continuaría hasta marzo por otros cinco distritos.
En la ciudad de Sapporo de la isla más septentrional del archipiélago japonés, Hokkaido, entre el 31 de enero y el 6 de febrero, se desarrolló un Festival de Cine Cubano, donde se presentaron con carácter de estreno en aquel país los filmes El Benny y Kangamba, de Jorge Luis Sánchez y Rogelio París, respectivamente. También fueron exhibidos los largometrajes de ficción Historias de la Revolución, Lucía, Memorias del subdesarrollo, En tres y dos, Clandestinos, Hello Hemingway, Fresa y chocolate y Viva Cuba.
La II Muestra de cine itinerante del Caribe, que había comenzado en Haití a finales de 2008, concluyó su recorrido en Cuba del 5 al 11 de febrero, siempre dedicada a niños, niñas y adolescentes, y con la participación de 31 países, cifra que casi duplica la alcanzada en la primera edición. Incluyó una selección de filmes de animación de realizadores de doce países caribeños, y un foro internacional consagrado al tema de la producción y la exhibición cinematográfica y audiovisual para la infancia y la juventud del Caribe. Según indicó el cineasta cubano Rigoberto López, presidente de la Muestra, el recorrido de este año contempló Bahamas, Barbados, Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, Panamá, Puerto Rico, Suriname y Venezuela. Más de cincuenta películas integraron la selección, con el fin de ofrecer un acercamiento a la diversidad cultural, lingüística y audiovisual de estos países. López precisó que la muestra se ha fortalecido y posibilita el nexo entre un movimiento de autores que realizan trabajos en sus lugares de orígenes o en la diáspora, y que son poco conocidos. Además, añadió que este año se ampliarán los horizontes y se exhibirá en otros países como Brasil y Argentina.
Fuerte presencia iberoamericana hubo en el Festival de Berlín con cintas de Chile, México, Perú, Argentina, España, Brasil, y Cuba. Por el Oso de Oro compitieron dos películas hispanoamericanas, La teta asustada, de la peruana Claudia Llosa; y Gigante, de Adrián Biniez, una coproducción uruguayo-argentina. La joven realizadora cubana Susana Barriga, reconocida en varios festivales cubanos y extranjeros por sus cortos Patria y The Illusion, participa en Berlín, en la sección competitiva de cortometrajes Berlinale Short, con The Illusion, laureado con una mención especial en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, y elegida por los críticos cubanos entre las mejores producciones del año 2008. Arriesgado estéticamente y portador de una desgarradora experiencia humana, el filme, coproducido por Cuba y Gran Bretaña, muestra el encuentro de la propia realizadora con su padre.
También hubo presencia cubana en el XXXI Festival Internacional de Cortometrajes de Clermont-Ferrand, Francia, llamado por algunos «el Cannes del cortometraje», donde participaron 76 obras escogidas para concurso, procedentes de 50 países. Cuba se presenta con dos cortos realizados en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños, por jóvenes latinoamericanos: Siberia, de la ecuatoriana Renata Duque, y Trazos, del ítalo-colombiano Daniel Baldotto.
La exposición Diseño de vestuario para el séptimo arte, abierta al público durante el mes de enero en la Casa de la Obrapía, en el casco histórico de La Habana Vieja, fue una iniciativa conjunta del ICAIC y la Oficina del Historiador de la Ciudad, con el fin de exhibir prendas de vestir originales utilizadas en diferentes filmaciones durante los últimos cincuenta años. Se pudieron apreciar vestuarios utilizados en Patakín, de Manuel Octavio Gómez; La bella del Alhambra, de Enrique Pineda Barnet y Lucía, de Humberto Solás, entre otros filmes.
Con la presentación del documental La bendición cubana, producido por Mundo Latino, sobre la colaboración médica cubana y la inauguración de una nueva planta de producción de vacunas en el Instituto Finlay, quedó inaugurado en Atenas, capital de Grecia, el Festival de Cine 50 años de la Revolución cubana, del 18 al 31 de diciembre. Se presentaron 50 títulos cubanos entre los cuales se destacaron los filmes Lucía, La última cena, Memorias del subdesarrollo, Los sobrevivientes y Viva Cuba; una muestra de significativos documentales producidos por el ICAIC, como Montaña de luz, Omara, Girón, Mi hermano Fidel, Hasta la victoria siempre y Crónica de una infamia, y la serie de siete capítulos Cuba: caminos de Revolución. Similares muestras tuvieron lugar en Filipinas y Zambia, donde el homenaje al cine cubano fue encabezado por El Benny.
Amplio programa editorial contempla el ICAIC para este 2009 como parte de las actividades por su 50 Aniversario. Se trata de una serie de títulos que abarca desde revistas en versiones impresas y digitales (números del 171 al 174 de la revista Cine Cubano, el quincenal Boletín Digital ICAIC, la mensual Cartelera de Cine y Video, el portal Cubacine de diaria actualización, la revista digital Cubanow y la trimestral Temas), hasta libros del sello Ediciones ICAIC. En el segmento editorial impreso, con dicho sello, se prevén la compilación El audiovisual y la niñez, a cargo de Pablo Ramos y Ailynn Torres (Ediciones ICAIC-UNICEF); Las mejores películas cubanas de los siglos xx y xxi, de Joel del Río y Marta Díaz; El actor de cine: arte, mito y realidad, de José Alberto Lezcano; Ciudadano cartel, de Sara Vega, Alicia García y Claudio Sotolongo; y Carteles son carteles… del ICAIC, de Sara Vega y Alicia García (Ediciones ICAIC-Cinemateca de Cuba, y Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano).
La relación de títulos a publicar durante 2009 incluye también Movimiento cubano de cine documental, de Jorge Luis Sánchez; Introducción al cine, de Luis Álvarez y Armando Pérez Padrón; la compilación de Pedro Noa titulada Ojeada al cine cubano, con textos de José Manuel Valdés-Rodríguez; A cuarenta años de La primera carga al machete, que por supuesto celebra las cuatro décadas del trascendental título dirigido por Manuel Octavio Gómez; Selección de textos inéditos de Julio García-Espinosa; El cine entre el infierno y el paraíso, de Alexander Mitta; Por la izquierda, t. II compilado por Julio César Guanche; y Eisenstein, de Víctor Shklovski. Se trabaja en la evaluación y edición de una veintena de títulos más que conformarán los planes editoriales de los próximos años.
El teatro y la música cubanos son motivos medulares de dos documentales recientemente estrenados en salas: El Charentón del Buendía, de Enrique Pineda Barnet, y Argeliers, de Félix de la Nuez. El documental de Pineda Barnet, con 45 minutos de duración, pone en pantalla las múltiples estrategias artísticas pulsadas por el grupo Buendía para ofrecer al público una nueva versión de la obra teatral Marat/Sade, de Peter Weiss. Flora Lauten y Raquel Carrió explican el modo en que se estructuró y puso en escena este duro y largo proceso, documentado por el cineasta, con cámaras de miniDV y en 55 casetes, que abarcaron igual número de horas de grabación, y alrededor de 500 fotos fijas. Con dirección, guión y producción del propio Pineda Barnet y fotografía de Pablo Massip, el documental se fue realizando por espacio de tres años, durante los cuales el director y su equipo comenzaron a grabar los testimonios sobre cómo iba a ser la puesta, el trabajo de los actores en su preparación y los resultados del encuentro con el público. El Charentón del Buendía se integra a la pertinaz voluntad del director por rendir homenaje al teatro cubano mediante el poder y la popularidad del cine.
El documental Argeliers, tuvo su premier el 10 de febrero, en la sala Hurón Azul de la UNEAC, y fue producido por el Centro de Desarrollo del Documental «Octavio Cortázar», de dicha institución. Constituye un homenaje al reciente aniversario 90 del maestro Argeliers León y un reconocimiento a quien desarrolló una multifacética labor como musicólogo, etnólogo, pedagogo, compositor y promotor, y bajo cuya tutoría se graduaron importantes generaciones de estudiosos de la cultura cubana. Para la realización del documental, Félix de la Nuez contó con el testimonio de destacados intelectuales que se vincularon al profesor en las diferentes etapas de su vida, como fueron María Teresa Linares (musicóloga y viuda de Argeliers), Harold Gramatges, Danilo Orozco, Roberto Valera, Miguel Barnet, Zoila Lapique, Ramiro Guerra, entre otros.
El Institut Valencià de Cinematografia Ricardo Muñoz Suay (IVAC) repasó varios títulos cubanos medulares en la historia de nuestro cine dentro del ciclo «40 años de clásicos del cine iberoamericano». La iniciativa pretendió fijar la atención sobre algunas de las películas que han marcado un antes y un después en la historia de las cinematografías iberoamericanas y han terminado por constituirse en clásicos incuestionables. El programa fue una versión abreviada (20 títulos) del ciclo «Historias en común. 40 años/50 películas del cine iberoamericano», que se organizó con motivo del I Congreso de Cultura Iberoamericana, celebrado en la ciudad de México en octubre de 2008. Posteriormente se programó en la Cineteca Nacional de México y, desde el pasado mes de diciembre y hasta finales de enero, pudo verse en España.
En Francia, Estados Unidos y muchos otros países se presentaron ciclos de cine como homenaje al cincuenta aniversario del ICAIC.
El cine cubano de los años sesenta, aquellos en que se produjeron las mejores películas cubanas de todos los tiempos (Lucía, Memorias del subdesarrollo, Las aventuras de Juan Quin Quin, La primera carga al machete) y los documentales de Santiago Álvarez, Oscar Valdés y Nicolás Guillén Landrián, fue objeto de debate e intercambio de pensamiento en el XVI Taller Nacional de la Crítica Cinematográfica, con sede en Camagüey, entre el 10 y el 15 de marzo. Se analizaron los filmes y su contexto histórico y social, las obras de Tomás Gutiérrez Alea y Humberto Solás, hasta las realizaciones de los cineastas extranjeros en Cuba por aquellos años, el Noticiero ICAIC Latinoamericano y muchos otros temas. Se realizó una exhibición especial del filme cubano La anunciación, de Enrique Pineda Barnet, con su participación. Estuvieron presentes en este taller un numeroso grupo de críticos, cineastas, actores y actrices de nuestro país que con sus ponencias e intervenciones, enriquecieron los debates. En enero, la Cinemateca de Cuba había organizado el panel de encuentro y debate titulado «El cine de los primeros tiempos del ICAIC, ¿la década prodigiosa?», en el cual se emitieron cuestionamientos relativos a si existió o no tal edad de oro, y cómo bautizar ese período que nos dejó en herencia tantos filmes memorables.
Este año de celebración para el ICAIC contempla también la ampliación del programa de la Videoteca Contracorriente, concebida para dejar testimonio en video de las entrevistas realizadas en nuestro país a destacadas personalidades en el mundo del pensamiento, el arte, las ciencias sociales y la cultura nacional e internacional. Se aumentará la presencia de personalidades cubanas, y serán de 25 a 30 las entrevistas que se realizarán. Durante el más reciente Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano fueron entrevistados el cineasta chileno Miguel Littín, el mexicano Paul Leduc, el productor uruguayo Walter Achugar, el intelectual panameño Pedro Rivera, el filósofo y ensayista franco-canadiense Hervé Fischer y la cineasta argentina Lucrecia Martel. Las opiniones e ideas de los historiadores norteamericanos Louis A. Pérez Jr., Rebecca Scott, del novelista y biógrafo mexicano Paco Ignacio Taibo II, del escritor y traductor español Santiago Alba Rico y del catedrático emérito de comunicación audiovisual español Román Gubern, con una extensa obra en esta especialidad, también engrosaron el arsenal intelectual que acumula la Videoteca Contracorriente en 60 entrevistas terminadas y completamente digitalizadas. Algunas de ellas serán agrupadas temáticamente en DVDs con vistas a su comercialización, y todas se han ido televisando por el Canal Educativo.
El pasado miércoles 18 de marzo falleció, en un hospital de Nueva York, la actriz británica Natasha Richardson, a consecuencia de las lesiones sufridas tras un accidente de esquí. La actriz, de 45 años, trabajó en cine y teatro pero es más conocida por su carrera teatral.
Provenía de una familia de personalidades estrechamente vinculadas al mundo del cine y televisión: su madre es la famosa actriz, activista y amiga de Cuba, Vanessa Redgrave; su padre, el director Tony Richardson; su hermana la estrella de televisión Joely Richardson; y su esposo, el internacionalmente reconocido actor Liam Neeson.
Del 24 de febrero al 1 de marzo, tuvo lugar la 8va. Muestra Nacional de Nuevos Realizadores, presidida por el cineasta Fernando Pérez. La edición estuvo dedicada a los 50 años de cine cubano en la Revolución, y concursaron 36 documentales, 21 filmes de ficción y 15 de animación. Las realizaciones de Susana Barriga y Rolando Rosabal Perea resultaron las más premiadas. En la sección «La mirada del otro» (para estudiantes extranjeros de cine en Cuba) se aceptaron 8 filmes de ficción y 8 documentales. Se presentaron, además, 11 proyectos finalistas en «Haciendo cine». Las clases magistrales fueron impartidas por Jorge Luis Sánchez, Juan Carlos Cremata y Manuel Iglesias, y versaron acerca del documental cubano, la cubanía en los filmes de Cremata y el montaje cinematográfico en El Benny.
Los premios recayeron en: el mediometraje de ficción La bala, de Pedro Luis Rodríguez; los documentales, The Illusion, de Susana Barriga; Fuera de liga, de Ian Padrón, Premio Especial del Jurado; y el filme de animación, Ser, de Orielvis Padrón. Recibieron menciones los documentales Rara avis: el caso Mañach, de Rolando Rosabal Perea, y Todo tiempo pasado fue mejor, de Zoe García; y en animación, Tic tac, de Alien Ma.
En dirección de fotografía se premió a Yamil Santana, por el cortometraje de ficción Decathexis; a Denise Guerra, por el documental Una niña, una escuela; y a Andrés Boero, por el documental La chirola (del boliviano Diego Antonio Mondaca). En sonido, lo recibieron David Vega y Adrián Replanski por su labor en Decathexis, y se otorgó mención a Rubén Valdés, por La chirola.
Por primera vez se convocó al premio de Mejor música original, que fue a las manos de Elvira Peña, por el cortometraje Oda a la piña. El jurado otorgó dos menciones: a Orielvis Padrón, por el conjunto de la obra musical presentada en el género de animación, y a Yanier Hechavarría por la música del documental Rara avis: el caso Mañach.
Las realizaciones que recibieron premios colaterales de varias instituciones fueron las siguientes: Close Up, documental de Damián Saínz y Roger Herrera (Premio Las cámaras de la Diversidad, UNESCO); Vacíos, documental de Daviel Lizano y ¿Grandes ligas?, documental de Ernesto Pérez (Grupo de Reflexión y Solidaridad Oscar Arnulfo Romero); Rara avis: el caso Mañach, de Rolando Rosabal Perea (Premio Documental Memoria Joven 2009, Centro Pablo de la Torriente y Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica); El futuro es hoy, documental de Sandra Gómez, y Cocuyos, corto de ficción de Tamara Segura (SIGNIS de Cuba y Premio Caminos, Centro Memorial Dr. Martin Luther King, Jr.); Twist, corto de animación de Márgel Sánchez e Irán Hernández (Asociación Hermanos Saíz); Tacones cercanos, documental de Jessica Rodríguez (Premio Caminos, Centro Memorial Dr. Martin Luther King, Jr. y Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños); The Illusion, de Susana Barriga (Facultad de Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual del Instituto Superior de Arte y Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica); Alina, 6 años, cortometraje de ficción de Milena Almira (Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños); Delfín Prats: entre el esplendor y el caos, documental de Carlos Y. Rodríguez (Fundación Ludwig de Cuba); Los que faltaron, documental de Erik Mendilahaxon (Fundación Ludwig de Cuba); «El Sueño de Daniel», capítulo 6 de la serie de animación Pubertad, de Ernesto Piña (Fundación Ludwig de Cuba); Esperando entodavía, documental de Adriana F. Castellanos (Fundación Antonio Núñez Jiménez).
En el concurso «Carteles Nuevos Diseñadores» el Mejor cartel fue el correspondiente a Malos en una ciudad mala, de Pablo Monterrey. Se adjudicaron dos menciones a Conversemos, de Haydé, y Por amor al arte, de Marla Albo. Otras obras destacadas fueron: Comunidades modernas, de Yadira Hierro; Conversemos, de Frank Baltodano; El deseo, de Fabiana; Lejos dentro de mí, de Yes; y El Bosque de Sherwood, de Fidel Alejandro.
Nuevos aires de renovación se esperan en la 9na. Muestra convocada para realizarse del 23 al 28 de febrero de 2010.
Tampoco se detiene la alentadora revitalización del cartel cinematográfico, expresión artística que representó una prestigiosa contribución del ICAIC, al diseño gráfico y a la plástica cubanos. Cada película y documental cubano, ciclo importante de la Cinemateca, u otro evento de relevancia, ha contado con su cartel, que han sido colocados en todas las instituciones y cines de Ciudad de La Habana. Se realizaron exposiciones de homenaje, en Valencia y en La Habana, a Muñoz Bachs y se publicó, preparado por la Cinemateca, el notable libro sobre su vida y obra. En ocasión del medio siglo de vida del Instituto, tuvo lugar una exposición trascendental, desde fines de febrero hasta finales de marzo, con los cien carteles más representativos de estos 50 años. A todo lo anterior, debemos agregar la realización del documental Poética gráfica insular, de Rolando Almirante, dedicado al cartel cinematográfico, cuyo auge en el presente incluye acontecimientos como el 70 cumpleaños de Leo Brouwer, el ciclo de conferencias «Cine y Revolución», el Premio Nacional de Cine 2009 y el 80 cumpleaños de Salvador Wood y el 90 de María Elena Molinet, entre otros. Además, los carteles cubanos acompañaron gráficamente el estreno de los largometrajes de ficción Ciudad en rojo, de Rebeca Chávez y El premio flaco, de Juan Carlos Cremata (ambos en el mes de marzo); y 4 hechizos, de Esteban G. Insausti; Infancia y adolescencia de José Martí, de Fernando Pérez; y Lisanka, de Daniel Díaz Torres, que se estrenarán escalonadamente entre julio y noviembre. También tendrán su expresión gráfica los documentales Feliz cumpleaños y Benny Moré (la serie),ambos deJorge Luis Sánchez; Destinos II, de Luis Leonel León; Santiago Álvarez, deMiriam Talavera; Sandinista, de Isabel Santos Solís y Engaño, de Enrique Álvarez, por solo mencionar unos cuantos.
El Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC) de Venezuela anunció que 2009 será un año ajetreado, pues saldrán a la pantalla grande al menos 44 producciones, entre ficción y documental (cortometrajes y largometrajes), superando así las 35 estrenadas en 2008. Entre estos títulos se encuentra Un té en La Habana, coproducción de la Villa del Cine, Alter Producciones y el ICAIC. Se trata de una comedia romántica sobre una muchacha que tiene que escoger entre dos hombres: un cubano revolucionario que vive en Cuba, y otro cubano, adinerado, que decidió exiliarse en Venezuela. Dirigida por Fina Torres (Oriana, Mecánicas celestes, Woman on Top) y rodada en Cuba, Un té en La Habana se realizó en formato HD (High Definition) con el protagonismo del joven Carlos Enrique Almirante (Madrigal).
Bajo la admonición de axiomas como la relevancia del documental en los últimos años, su activismo audiovisual en un mundo cambiante, la libertad expresiva o estética y la construcción de memoria para el futuro, tuvo lugar durante dos días de enero y cuatro sesiones, con la presencia activa de profesionales de siete países, el Primer Encuentro de Documentalistas en la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV), para polemizar y, de ser posible, trazar estrategias, en torno a «un género que mira, quiere, cambia, hace, puede y debe», según rezaba en el folleto que resumía los temarios del Encuentro. Memorable es lo más conservador que se puede decir sobre un encuentro donde se destacó la riqueza y diversidad de enfoques, la intensidad y el apasionamiento en las intervenciones, la pluralidad de conceptos y principios que gravitan en torno a un género cuyo lenguaje y complejidad conceptual y estética ha evolucionado a grandes tramos, mucho más que el cine de ficción, en las últimas tres o cuatro décadas. Participaron, entre otros, los australianos Russell Porter y David Bradbury, el serbio Goran Radovanovic, el argentino Miguel Pérez, el británico Michael Chanan, el norteamericano Tom Weimberg, la alemana Claudia Von Alemann, el canadiense Richard Kerr, la norteamericana Estela Bravo, el brasileño Miguel Silveira y los cubanos Rigoberto López, Senobio Faget (Puri), Lázara Herrera, Jorge Fuentes y Enrique Álvarez. Entre las ideas discutidas estuvo la alocución de Russell Porter respecto a su concepción del esperanto documental, en la cual se sugiere pensar globalmente y actuar localmente, puesto que existe un lenguaje documental universal, así como hay una condición humana universal. La clave estaría, según Porter, en buscar estas dos nociones universales en el trabajo documental: mirar por debajo de la superficie de sus temas y personajes inmediatos, para descubrir la verdad humana universal que siempre subyace en todo.
El 9 de febrero falleció, a los sesenta y cinco años, Raúl García Aparicio, uno de los sonidistas más destacados de la cinematografía nacional y fundador del ICAIC. Fue editor y diseñador de banda sonora en montaje digital, y profesor, tanto de los cursos de formación impartidos en el ICAIC, como en la Escuela Internacional de Cine, Televisión y Video de San Antonio de los Baños. Su filmografía abarca más de ciento veinte filmes, entre los que se cuentan los documentales Vaqueros del Cauto y Una foto recorre el mundo, así como los largometrajes de ficción La primera carga al machete, Demasiado miedo a la vida o Plaff, La bella del Alhambra, y más recientemente, Páginas del diario de Mauricio, entre otros aún en proceso. En el próximo número, Cine Cubano le rendirá homenaje con un trabajo sobre su vida y obra.
Descriptor(es)
1. CARTEL
2. ENCUENTRO DE DOCUMENTALISTAS LATINOAMERICANOS DEL SIGLO XXI, 1ED., CARACAS, VENEZUELA
3. ESCUELA INTERNACIONAL DE CINE Y TELEVISION (EICTV)
4. FESTIVAL DE CINE
5. INSTITUTO CUBANO DEL ARTE E INDUSTRIA CINEMATOGRAFICOS (ICAIC)
6. INSTITUTO NACIONAL DE CINE Y ARTES AUDIOVISUALES (INCAA)
7. LITERATURA
8. MUESTRA DE NUEVOS REALIZADORES, LA HABANA, CUBA
9. MUESTRA ITINERANTE DE CINE DEL CARIBE
10. TALLER NACIONAL DE CRITICA CINEMATOGRAFICA, CAMAGUEY, CUBA
11. TALLERES DE CINE
Título: Noticiero
Autor(es): Joel del Río Fuentes
Fuente: Revista Cine Cubano On Line
Número: 13
Año de publicación: 2009
El Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos arriba a su primer medio siglo, por cuya conmemoración, se trazó un ambicioso programa de actividades y eventos que, comenzando por estrenos de su más reciente producción, se propone el recuento, el análisis y el homenaje merecido. En el primer trimestre del año se estrenaron cinco filmes: Omertà, El cuerno de la abundancia, Los dioses rotos, Ciudad en rojo y La anunciación. El 24 de marzo, fecha de su fundación, se llevó a cabo en el teatro Karl Marx la gala conmemorativa por el 50 aniversario, presidido por el General de Ejército y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Raúl Castro, quien condecoró a Alfredo Guevara con la Orden «José Martí», en cumplimiento de un acuerdo del Consejo de Estado. Además, entregó un diploma de reconocimiento al ICAIC con motivo de tan significativa ocasión. Las palabras centrales del acto, que inician esta Revista, estuvieron a cargo de Abel Prieto, miembro del Buró Político y ministro de Cultura. Abel, en compañía de Omar González, presidente del ICAIC, entregó diplomas por su condición de fundadores, a 23 destacados artistas, técnicos, especialistas y trabajadores que, encabezados por el realizador Julio García-Espinosa, los recibieron en representación de un grupo más numeroso a quienes se les entregará posteriormente. El cierre de la gala lo constituyó el estreno del largometraje Ciudad en rojo, de la realizadora Rebeca Chávez, inspirado en la novela Bertillón 166, de José Soler Puig.
Desde el 15 de diciembre y hasta el 30 de marzo se desarrolló en el cine Charles Chaplin el ciclo «Historia de nuestro cine contada en imágenes», organizado por la Cinemateca de Cuba, que constituye un recorrido por lo más representativo del cine nacional, desde el silente hasta la actualidad. Asimismo, se ha estado desarrollando el programa de conferencias «Cine y Revolución», desde el 4 de marzo y hasta el 6 de mayo, referidas a aspectos fundamentales del cine cubano en los 50 años de la Revolución, especialmente, lo producido por el ICAIC.
Los días 16, 17 y 18 de febrero, en el cine 23 y 12, el ensayista, narrador y antropólogo argentino Adolfo Colombres impartió el seminario «El bosque simbólico: acercamiento a una antropología del arte, el cine y la literatura», destinado a profesionales, investigadores, estudiantes de carreras de letras y amantes del tema en general. Se ofreció en tres módulos: «El hombre como animal simbólico», que analizaba los mitos y los ritos como fundamento de la cultura; «La construcción de significados en las artes de la representación y el documental antropológico», relativo a Flaherty, Dziga Vertov, Jean Rouch y el Cinema-Verité, y «La construcción de significados en la narración oral».
El primer día de febrero, en tandas sucesivas del cine Charles Chaplin, se proyectaron La muerte de un burócrata, de Tomás Gutiérrez Alea; Rancheador, de Sergio Giral; y Jíbaro, de Daniel Díaz Torres, tres cintas que conforman el homenaje del ICAIC a Salvador Wood, quien recientemente arribó a los ochenta años de edad. También se dedicaron varias exhibiciones a la memoria de Héctor García Mesa, director de la Cinemateca durante muchos años e inspirador de la política cultural de esa institución. Dos películas en las que intervino como guionista –El joven rebelde, de Julio García-Espinosa; y La salación, de Manuel Octavio Gómez– fueron exhibidas junto a varios materiales del Noticiero ICAIC Latinoamericano recientemente restaurados. Paralelamente, en la sala de video Charlot se pudieron ver clásicos preferidos por García Mesa que formaron parte de memorables ciclos organizados por aquella Cinemateca que consiguió erigirse en epicentro de arte y cultura en la capital cubana: La quimera del oro, de Charles Chaplin; El gabinete del doctor Caligari, de Robert Wiene; y Algunos prefieren quemarse, de Billy Wilder. Pastor Vega fue recordado el 12 de febrero con la proyección de Vidas paralelas, Las profecías de Amanda y Retrato de Teresa, que cumple este año los veinte de su realización, y de haber despertado una de las más grandes polémicas de índole sociológica nunca provocadas por una película cubana.
En Caracas, tuvo lugar, en noviembre de 2008, el I Encuentro de Documentalistas Latinoamericanos del Siglo xxi, que contó con la presencia de cineastas de 19 países de la región y autoridades de diversos organismos nacionales del cine latinoamericano. A lo largo de cuatro días se efectuaron debates en mesas de trabajo y conferencias magistrales, a las que se sumaron proyecciones de documentales de los presentados en Mérida, Venezuela, en 1968, en lo que fue la Primera Muestra de Cine Documental Latinoamericano, y que marcó un hito en la historia del audiovisual del continente. La reunión de cineastas estuvo orientada particularmente a la promoción del cine documental, y a la indagación de nuevos métodos para establecer nexos de trabajo en el área continental entre las diferentes generaciones de documentalistas y originar así nuevas plazas para la producción, intercambio y difusión de piezas audiovisuales. El encuentro concluyó con la declaración más representativa, hasta el momento, sobre la problemática actual del cine latinoamericano. Omar González, presidente del ICAIC, se cuenta entre los firmantes de un acta en la cual se aboga por una producción cultural y audiovisual con valores históricos, por reforzar las cinematografías nacionales y regionales, y lograr un audiovisual latinoamericano creativo e identitario. Con el Encuentro se busca impulsar políticas de Estado en los países de la región de apoyo al audiovisual entendido en su acepción cultural y artística.
Con la exhibición de Por primera vez y Hombres sobre cubierta abrió el 8 de enero una muestra de cine cubano en Argentina, en homenaje al aniversario 50 del triunfo de la Revolución. Durante el ciclo, se proyectaron 15 largometrajes y nueve documentales del ICAIC, una institución que según Omar González, «protegió el cine nacional y formó un público leal a su cine, a la diversidad cultural y a la cinematografía latinoamericana». El titular del Instituto de cine cubano agradeció el empeño del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) de Argentina por realizar la más grande muestra cubana exhibida en la geografía trasandina. Por su parte, Liliana Mazure, presidente del INCAA, anunció que la serie recorrería casi todo el país. La muestra cubana abarcó desde Historias de la Revolución, de 1960, hasta Kangamba, estreno cubano de 2008. La muerte de un burócrata fue elegida para la clausura con su exhibición en el cine teatro Ateneo de Buenos Aires, y así culminó el programa que llegó a 20 ciudades de nueve provincias, y continuaría hasta marzo por otros cinco distritos.
En la ciudad de Sapporo de la isla más septentrional del archipiélago japonés, Hokkaido, entre el 31 de enero y el 6 de febrero, se desarrolló un Festival de Cine Cubano, donde se presentaron con carácter de estreno en aquel país los filmes El Benny y Kangamba, de Jorge Luis Sánchez y Rogelio París, respectivamente. También fueron exhibidos los largometrajes de ficción Historias de la Revolución, Lucía, Memorias del subdesarrollo, En tres y dos, Clandestinos, Hello Hemingway, Fresa y chocolate y Viva Cuba.
La II Muestra de cine itinerante del Caribe, que había comenzado en Haití a finales de 2008, concluyó su recorrido en Cuba del 5 al 11 de febrero, siempre dedicada a niños, niñas y adolescentes, y con la participación de 31 países, cifra que casi duplica la alcanzada en la primera edición. Incluyó una selección de filmes de animación de realizadores de doce países caribeños, y un foro internacional consagrado al tema de la producción y la exhibición cinematográfica y audiovisual para la infancia y la juventud del Caribe. Según indicó el cineasta cubano Rigoberto López, presidente de la Muestra, el recorrido de este año contempló Bahamas, Barbados, Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, Panamá, Puerto Rico, Suriname y Venezuela. Más de cincuenta películas integraron la selección, con el fin de ofrecer un acercamiento a la diversidad cultural, lingüística y audiovisual de estos países. López precisó que la muestra se ha fortalecido y posibilita el nexo entre un movimiento de autores que realizan trabajos en sus lugares de orígenes o en la diáspora, y que son poco conocidos. Además, añadió que este año se ampliarán los horizontes y se exhibirá en otros países como Brasil y Argentina.
Fuerte presencia iberoamericana hubo en el Festival de Berlín con cintas de Chile, México, Perú, Argentina, España, Brasil, y Cuba. Por el Oso de Oro compitieron dos películas hispanoamericanas, La teta asustada, de la peruana Claudia Llosa; y Gigante, de Adrián Biniez, una coproducción uruguayo-argentina. La joven realizadora cubana Susana Barriga, reconocida en varios festivales cubanos y extranjeros por sus cortos Patria y The Illusion, participa en Berlín, en la sección competitiva de cortometrajes Berlinale Short, con The Illusion, laureado con una mención especial en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, y elegida por los críticos cubanos entre las mejores producciones del año 2008. Arriesgado estéticamente y portador de una desgarradora experiencia humana, el filme, coproducido por Cuba y Gran Bretaña, muestra el encuentro de la propia realizadora con su padre.
También hubo presencia cubana en el XXXI Festival Internacional de Cortometrajes de Clermont-Ferrand, Francia, llamado por algunos «el Cannes del cortometraje», donde participaron 76 obras escogidas para concurso, procedentes de 50 países. Cuba se presenta con dos cortos realizados en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños, por jóvenes latinoamericanos: Siberia, de la ecuatoriana Renata Duque, y Trazos, del ítalo-colombiano Daniel Baldotto.
La exposición Diseño de vestuario para el séptimo arte, abierta al público durante el mes de enero en la Casa de la Obrapía, en el casco histórico de La Habana Vieja, fue una iniciativa conjunta del ICAIC y la Oficina del Historiador de la Ciudad, con el fin de exhibir prendas de vestir originales utilizadas en diferentes filmaciones durante los últimos cincuenta años. Se pudieron apreciar vestuarios utilizados en Patakín, de Manuel Octavio Gómez; La bella del Alhambra, de Enrique Pineda Barnet y Lucía, de Humberto Solás, entre otros filmes.
Con la presentación del documental La bendición cubana, producido por Mundo Latino, sobre la colaboración médica cubana y la inauguración de una nueva planta de producción de vacunas en el Instituto Finlay, quedó inaugurado en Atenas, capital de Grecia, el Festival de Cine 50 años de la Revolución cubana, del 18 al 31 de diciembre. Se presentaron 50 títulos cubanos entre los cuales se destacaron los filmes Lucía, La última cena, Memorias del subdesarrollo, Los sobrevivientes y Viva Cuba; una muestra de significativos documentales producidos por el ICAIC, como Montaña de luz, Omara, Girón, Mi hermano Fidel, Hasta la victoria siempre y Crónica de una infamia, y la serie de siete capítulos Cuba: caminos de Revolución. Similares muestras tuvieron lugar en Filipinas y Zambia, donde el homenaje al cine cubano fue encabezado por El Benny.
Amplio programa editorial contempla el ICAIC para este 2009 como parte de las actividades por su 50 Aniversario. Se trata de una serie de títulos que abarca desde revistas en versiones impresas y digitales (números del 171 al 174 de la revista Cine Cubano, el quincenal Boletín Digital ICAIC, la mensual Cartelera de Cine y Video, el portal Cubacine de diaria actualización, la revista digital Cubanow y la trimestral Temas), hasta libros del sello Ediciones ICAIC. En el segmento editorial impreso, con dicho sello, se prevén la compilación El audiovisual y la niñez, a cargo de Pablo Ramos y Ailynn Torres (Ediciones ICAIC-UNICEF); Las mejores películas cubanas de los siglos xx y xxi, de Joel del Río y Marta Díaz; El actor de cine: arte, mito y realidad, de José Alberto Lezcano; Ciudadano cartel, de Sara Vega, Alicia García y Claudio Sotolongo; y Carteles son carteles… del ICAIC, de Sara Vega y Alicia García (Ediciones ICAIC-Cinemateca de Cuba, y Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano).
La relación de títulos a publicar durante 2009 incluye también Movimiento cubano de cine documental, de Jorge Luis Sánchez; Introducción al cine, de Luis Álvarez y Armando Pérez Padrón; la compilación de Pedro Noa titulada Ojeada al cine cubano, con textos de José Manuel Valdés-Rodríguez; A cuarenta años de La primera carga al machete, que por supuesto celebra las cuatro décadas del trascendental título dirigido por Manuel Octavio Gómez; Selección de textos inéditos de Julio García-Espinosa; El cine entre el infierno y el paraíso, de Alexander Mitta; Por la izquierda, t. II compilado por Julio César Guanche; y Eisenstein, de Víctor Shklovski. Se trabaja en la evaluación y edición de una veintena de títulos más que conformarán los planes editoriales de los próximos años.
El teatro y la música cubanos son motivos medulares de dos documentales recientemente estrenados en salas: El Charentón del Buendía, de Enrique Pineda Barnet, y Argeliers, de Félix de la Nuez. El documental de Pineda Barnet, con 45 minutos de duración, pone en pantalla las múltiples estrategias artísticas pulsadas por el grupo Buendía para ofrecer al público una nueva versión de la obra teatral Marat/Sade, de Peter Weiss. Flora Lauten y Raquel Carrió explican el modo en que se estructuró y puso en escena este duro y largo proceso, documentado por el cineasta, con cámaras de miniDV y en 55 casetes, que abarcaron igual número de horas de grabación, y alrededor de 500 fotos fijas. Con dirección, guión y producción del propio Pineda Barnet y fotografía de Pablo Massip, el documental se fue realizando por espacio de tres años, durante los cuales el director y su equipo comenzaron a grabar los testimonios sobre cómo iba a ser la puesta, el trabajo de los actores en su preparación y los resultados del encuentro con el público. El Charentón del Buendía se integra a la pertinaz voluntad del director por rendir homenaje al teatro cubano mediante el poder y la popularidad del cine.
El documental Argeliers, tuvo su premier el 10 de febrero, en la sala Hurón Azul de la UNEAC, y fue producido por el Centro de Desarrollo del Documental «Octavio Cortázar», de dicha institución. Constituye un homenaje al reciente aniversario 90 del maestro Argeliers León y un reconocimiento a quien desarrolló una multifacética labor como musicólogo, etnólogo, pedagogo, compositor y promotor, y bajo cuya tutoría se graduaron importantes generaciones de estudiosos de la cultura cubana. Para la realización del documental, Félix de la Nuez contó con el testimonio de destacados intelectuales que se vincularon al profesor en las diferentes etapas de su vida, como fueron María Teresa Linares (musicóloga y viuda de Argeliers), Harold Gramatges, Danilo Orozco, Roberto Valera, Miguel Barnet, Zoila Lapique, Ramiro Guerra, entre otros.
El Institut Valencià de Cinematografia Ricardo Muñoz Suay (IVAC) repasó varios títulos cubanos medulares en la historia de nuestro cine dentro del ciclo «40 años de clásicos del cine iberoamericano». La iniciativa pretendió fijar la atención sobre algunas de las películas que han marcado un antes y un después en la historia de las cinematografías iberoamericanas y han terminado por constituirse en clásicos incuestionables. El programa fue una versión abreviada (20 títulos) del ciclo «Historias en común. 40 años/50 películas del cine iberoamericano», que se organizó con motivo del I Congreso de Cultura Iberoamericana, celebrado en la ciudad de México en octubre de 2008. Posteriormente se programó en la Cineteca Nacional de México y, desde el pasado mes de diciembre y hasta finales de enero, pudo verse en España.
En Francia, Estados Unidos y muchos otros países se presentaron ciclos de cine como homenaje al cincuenta aniversario del ICAIC.
El cine cubano de los años sesenta, aquellos en que se produjeron las mejores películas cubanas de todos los tiempos (Lucía, Memorias del subdesarrollo, Las aventuras de Juan Quin Quin, La primera carga al machete) y los documentales de Santiago Álvarez, Oscar Valdés y Nicolás Guillén Landrián, fue objeto de debate e intercambio de pensamiento en el XVI Taller Nacional de la Crítica Cinematográfica, con sede en Camagüey, entre el 10 y el 15 de marzo. Se analizaron los filmes y su contexto histórico y social, las obras de Tomás Gutiérrez Alea y Humberto Solás, hasta las realizaciones de los cineastas extranjeros en Cuba por aquellos años, el Noticiero ICAIC Latinoamericano y muchos otros temas. Se realizó una exhibición especial del filme cubano La anunciación, de Enrique Pineda Barnet, con su participación. Estuvieron presentes en este taller un numeroso grupo de críticos, cineastas, actores y actrices de nuestro país que con sus ponencias e intervenciones, enriquecieron los debates. En enero, la Cinemateca de Cuba había organizado el panel de encuentro y debate titulado «El cine de los primeros tiempos del ICAIC, ¿la década prodigiosa?», en el cual se emitieron cuestionamientos relativos a si existió o no tal edad de oro, y cómo bautizar ese período que nos dejó en herencia tantos filmes memorables.
Este año de celebración para el ICAIC contempla también la ampliación del programa de la Videoteca Contracorriente, concebida para dejar testimonio en video de las entrevistas realizadas en nuestro país a destacadas personalidades en el mundo del pensamiento, el arte, las ciencias sociales y la cultura nacional e internacional. Se aumentará la presencia de personalidades cubanas, y serán de 25 a 30 las entrevistas que se realizarán. Durante el más reciente Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano fueron entrevistados el cineasta chileno Miguel Littín, el mexicano Paul Leduc, el productor uruguayo Walter Achugar, el intelectual panameño Pedro Rivera, el filósofo y ensayista franco-canadiense Hervé Fischer y la cineasta argentina Lucrecia Martel. Las opiniones e ideas de los historiadores norteamericanos Louis A. Pérez Jr., Rebecca Scott, del novelista y biógrafo mexicano Paco Ignacio Taibo II, del escritor y traductor español Santiago Alba Rico y del catedrático emérito de comunicación audiovisual español Román Gubern, con una extensa obra en esta especialidad, también engrosaron el arsenal intelectual que acumula la Videoteca Contracorriente en 60 entrevistas terminadas y completamente digitalizadas. Algunas de ellas serán agrupadas temáticamente en DVDs con vistas a su comercialización, y todas se han ido televisando por el Canal Educativo.
El pasado miércoles 18 de marzo falleció, en un hospital de Nueva York, la actriz británica Natasha Richardson, a consecuencia de las lesiones sufridas tras un accidente de esquí. La actriz, de 45 años, trabajó en cine y teatro pero es más conocida por su carrera teatral.
Provenía de una familia de personalidades estrechamente vinculadas al mundo del cine y televisión: su madre es la famosa actriz, activista y amiga de Cuba, Vanessa Redgrave; su padre, el director Tony Richardson; su hermana la estrella de televisión Joely Richardson; y su esposo, el internacionalmente reconocido actor Liam Neeson.
Del 24 de febrero al 1 de marzo, tuvo lugar la 8va. Muestra Nacional de Nuevos Realizadores, presidida por el cineasta Fernando Pérez. La edición estuvo dedicada a los 50 años de cine cubano en la Revolución, y concursaron 36 documentales, 21 filmes de ficción y 15 de animación. Las realizaciones de Susana Barriga y Rolando Rosabal Perea resultaron las más premiadas. En la sección «La mirada del otro» (para estudiantes extranjeros de cine en Cuba) se aceptaron 8 filmes de ficción y 8 documentales. Se presentaron, además, 11 proyectos finalistas en «Haciendo cine». Las clases magistrales fueron impartidas por Jorge Luis Sánchez, Juan Carlos Cremata y Manuel Iglesias, y versaron acerca del documental cubano, la cubanía en los filmes de Cremata y el montaje cinematográfico en El Benny.
Los premios recayeron en: el mediometraje de ficción La bala, de Pedro Luis Rodríguez; los documentales, The Illusion, de Susana Barriga; Fuera de liga, de Ian Padrón, Premio Especial del Jurado; y el filme de animación, Ser, de Orielvis Padrón. Recibieron menciones los documentales Rara avis: el caso Mañach, de Rolando Rosabal Perea, y Todo tiempo pasado fue mejor, de Zoe García; y en animación, Tic tac, de Alien Ma.
En dirección de fotografía se premió a Yamil Santana, por el cortometraje de ficción Decathexis; a Denise Guerra, por el documental Una niña, una escuela; y a Andrés Boero, por el documental La chirola (del boliviano Diego Antonio Mondaca). En sonido, lo recibieron David Vega y Adrián Replanski por su labor en Decathexis, y se otorgó mención a Rubén Valdés, por La chirola.
Por primera vez se convocó al premio de Mejor música original, que fue a las manos de Elvira Peña, por el cortometraje Oda a la piña. El jurado otorgó dos menciones: a Orielvis Padrón, por el conjunto de la obra musical presentada en el género de animación, y a Yanier Hechavarría por la música del documental Rara avis: el caso Mañach.
Las realizaciones que recibieron premios colaterales de varias instituciones fueron las siguientes: Close Up, documental de Damián Saínz y Roger Herrera (Premio Las cámaras de la Diversidad, UNESCO); Vacíos, documental de Daviel Lizano y ¿Grandes ligas?, documental de Ernesto Pérez (Grupo de Reflexión y Solidaridad Oscar Arnulfo Romero); Rara avis: el caso Mañach, de Rolando Rosabal Perea (Premio Documental Memoria Joven 2009, Centro Pablo de la Torriente y Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica); El futuro es hoy, documental de Sandra Gómez, y Cocuyos, corto de ficción de Tamara Segura (SIGNIS de Cuba y Premio Caminos, Centro Memorial Dr. Martin Luther King, Jr.); Twist, corto de animación de Márgel Sánchez e Irán Hernández (Asociación Hermanos Saíz); Tacones cercanos, documental de Jessica Rodríguez (Premio Caminos, Centro Memorial Dr. Martin Luther King, Jr. y Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños); The Illusion, de Susana Barriga (Facultad de Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual del Instituto Superior de Arte y Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica); Alina, 6 años, cortometraje de ficción de Milena Almira (Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños); Delfín Prats: entre el esplendor y el caos, documental de Carlos Y. Rodríguez (Fundación Ludwig de Cuba); Los que faltaron, documental de Erik Mendilahaxon (Fundación Ludwig de Cuba); «El Sueño de Daniel», capítulo 6 de la serie de animación Pubertad, de Ernesto Piña (Fundación Ludwig de Cuba); Esperando entodavía, documental de Adriana F. Castellanos (Fundación Antonio Núñez Jiménez).
En el concurso «Carteles Nuevos Diseñadores» el Mejor cartel fue el correspondiente a Malos en una ciudad mala, de Pablo Monterrey. Se adjudicaron dos menciones a Conversemos, de Haydé, y Por amor al arte, de Marla Albo. Otras obras destacadas fueron: Comunidades modernas, de Yadira Hierro; Conversemos, de Frank Baltodano; El deseo, de Fabiana; Lejos dentro de mí, de Yes; y El Bosque de Sherwood, de Fidel Alejandro.
Nuevos aires de renovación se esperan en la 9na. Muestra convocada para realizarse del 23 al 28 de febrero de 2010.
Tampoco se detiene la alentadora revitalización del cartel cinematográfico, expresión artística que representó una prestigiosa contribución del ICAIC, al diseño gráfico y a la plástica cubanos. Cada película y documental cubano, ciclo importante de la Cinemateca, u otro evento de relevancia, ha contado con su cartel, que han sido colocados en todas las instituciones y cines de Ciudad de La Habana. Se realizaron exposiciones de homenaje, en Valencia y en La Habana, a Muñoz Bachs y se publicó, preparado por la Cinemateca, el notable libro sobre su vida y obra. En ocasión del medio siglo de vida del Instituto, tuvo lugar una exposición trascendental, desde fines de febrero hasta finales de marzo, con los cien carteles más representativos de estos 50 años. A todo lo anterior, debemos agregar la realización del documental Poética gráfica insular, de Rolando Almirante, dedicado al cartel cinematográfico, cuyo auge en el presente incluye acontecimientos como el 70 cumpleaños de Leo Brouwer, el ciclo de conferencias «Cine y Revolución», el Premio Nacional de Cine 2009 y el 80 cumpleaños de Salvador Wood y el 90 de María Elena Molinet, entre otros. Además, los carteles cubanos acompañaron gráficamente el estreno de los largometrajes de ficción Ciudad en rojo, de Rebeca Chávez y El premio flaco, de Juan Carlos Cremata (ambos en el mes de marzo); y 4 hechizos, de Esteban G. Insausti; Infancia y adolescencia de José Martí, de Fernando Pérez; y Lisanka, de Daniel Díaz Torres, que se estrenarán escalonadamente entre julio y noviembre. También tendrán su expresión gráfica los documentales Feliz cumpleaños y Benny Moré (la serie),ambos deJorge Luis Sánchez; Destinos II, de Luis Leonel León; Santiago Álvarez, deMiriam Talavera; Sandinista, de Isabel Santos Solís y Engaño, de Enrique Álvarez, por solo mencionar unos cuantos.
El Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC) de Venezuela anunció que 2009 será un año ajetreado, pues saldrán a la pantalla grande al menos 44 producciones, entre ficción y documental (cortometrajes y largometrajes), superando así las 35 estrenadas en 2008. Entre estos títulos se encuentra Un té en La Habana, coproducción de la Villa del Cine, Alter Producciones y el ICAIC. Se trata de una comedia romántica sobre una muchacha que tiene que escoger entre dos hombres: un cubano revolucionario que vive en Cuba, y otro cubano, adinerado, que decidió exiliarse en Venezuela. Dirigida por Fina Torres (Oriana, Mecánicas celestes, Woman on Top) y rodada en Cuba, Un té en La Habana se realizó en formato HD (High Definition) con el protagonismo del joven Carlos Enrique Almirante (Madrigal).
Bajo la admonición de axiomas como la relevancia del documental en los últimos años, su activismo audiovisual en un mundo cambiante, la libertad expresiva o estética y la construcción de memoria para el futuro, tuvo lugar durante dos días de enero y cuatro sesiones, con la presencia activa de profesionales de siete países, el Primer Encuentro de Documentalistas en la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV), para polemizar y, de ser posible, trazar estrategias, en torno a «un género que mira, quiere, cambia, hace, puede y debe», según rezaba en el folleto que resumía los temarios del Encuentro. Memorable es lo más conservador que se puede decir sobre un encuentro donde se destacó la riqueza y diversidad de enfoques, la intensidad y el apasionamiento en las intervenciones, la pluralidad de conceptos y principios que gravitan en torno a un género cuyo lenguaje y complejidad conceptual y estética ha evolucionado a grandes tramos, mucho más que el cine de ficción, en las últimas tres o cuatro décadas. Participaron, entre otros, los australianos Russell Porter y David Bradbury, el serbio Goran Radovanovic, el argentino Miguel Pérez, el británico Michael Chanan, el norteamericano Tom Weimberg, la alemana Claudia Von Alemann, el canadiense Richard Kerr, la norteamericana Estela Bravo, el brasileño Miguel Silveira y los cubanos Rigoberto López, Senobio Faget (Puri), Lázara Herrera, Jorge Fuentes y Enrique Álvarez. Entre las ideas discutidas estuvo la alocución de Russell Porter respecto a su concepción del esperanto documental, en la cual se sugiere pensar globalmente y actuar localmente, puesto que existe un lenguaje documental universal, así como hay una condición humana universal. La clave estaría, según Porter, en buscar estas dos nociones universales en el trabajo documental: mirar por debajo de la superficie de sus temas y personajes inmediatos, para descubrir la verdad humana universal que siempre subyace en todo.
El 9 de febrero falleció, a los sesenta y cinco años, Raúl García Aparicio, uno de los sonidistas más destacados de la cinematografía nacional y fundador del ICAIC. Fue editor y diseñador de banda sonora en montaje digital, y profesor, tanto de los cursos de formación impartidos en el ICAIC, como en la Escuela Internacional de Cine, Televisión y Video de San Antonio de los Baños. Su filmografía abarca más de ciento veinte filmes, entre los que se cuentan los documentales Vaqueros del Cauto y Una foto recorre el mundo, así como los largometrajes de ficción La primera carga al machete, Demasiado miedo a la vida o Plaff, La bella del Alhambra, y más recientemente, Páginas del diario de Mauricio, entre otros aún en proceso. En el próximo número, Cine Cubano le rendirá homenaje con un trabajo sobre su vida y obra.
Descriptor(es)
1. CARTEL
2. ENCUENTRO DE DOCUMENTALISTAS LATINOAMERICANOS DEL SIGLO XXI, 1ED., CARACAS, VENEZUELA
3. ESCUELA INTERNACIONAL DE CINE Y TELEVISION (EICTV)
4. FESTIVAL DE CINE
5. INSTITUTO CUBANO DEL ARTE E INDUSTRIA CINEMATOGRAFICOS (ICAIC)
6. INSTITUTO NACIONAL DE CINE Y ARTES AUDIOVISUALES (INCAA)
7. LITERATURA
8. MUESTRA DE NUEVOS REALIZADORES, LA HABANA, CUBA
9. MUESTRA ITINERANTE DE CINE DEL CARIBE
10. TALLER NACIONAL DE CRITICA CINEMATOGRAFICA, CAMAGUEY, CUBA
11. TALLERES DE CINE
Web: http://www.cubacine.cult.cu/sitios/revistacinecubano/digital13/cap05.htm