Debido a los caprichos de la distribución cinematográfica, el estatus de Jean-Pierre Melville como uno de los principales cineastas franceses aún no ha sido reconocido en el extranjero; pero es solo cuestión de tiempo antes de que este hombre notable (n. 1917) sea reconocido como el padre espiritual de la Nueva Ola francesa, como una influencia decisiva en el enfoque idiosincrásico de Robert Bresson para hacer cine, y como un director tan impregnado por su amor por todo lo estadounidense que, en efecto, ha trasplantado los mejores elementos del cine de Hollywood a un estilo clásico francés. Sus películas recientes, thrillers ambientados en el medio de los gánsteres franceses, son, como él dice, westerns trasplantados a un nuevo entorno. En este libro de entrevistas con Rui Nogueira, Melville no solo explora y analiza sus propias películas, sus teorías y su enfoque del cine, sino que explica cómo, en 1947, desafió a los sindicatos para hacer su primera película, Le Silence de la Mer, sin autorización ni ayuda de ningún tipo, y sin siquiera obtener los derechos de la novela de Vercors en la que se basa la película.

La historia continúa con el gran succès d'estime de Le Silence de la Mer cuando finalmente se completó y mostró después de superar enormes dificultades; cómo su uso de un narrador fuera de la pantalla y su estilo poético reducido en esta película fueron posteriormente anexados y desarrollados por Bresson; cómo el entusiasmo de Jean Cocteau condujo a una convocatoria para filmar Les Enfants Terribles, ocasionando un choque de temperamentos afectuoso pero irritable; cómo, en parte por inclinación y en parte por necesidad económica, comenzó a utilizar la filmación en exteriores y cámaras de mano en películas de bajo presupuesto como Bob le Flambeur y Deux Hommes dans Manhattan, que luego se convirtieron en modelos para la revolución New Wave; y quizás lo más interesante de todo, cómo su conocimiento enciclopédico de las películas de Hollywood de los años treinta dio forma e influyó en su propio trabajo.