Tres mujeres protagonizan la más reciente película de Enrique (Kiki) Álvarez, Venecia (2014). Esta comedia -con tintes de drama- le hará pasar un excelente rato, gracias a un guion aparentemente sencillo, pero que tiene tras sí toda la hondura del mundo femenino.
“Venecia es la continuidad del trabajo que venía haciendo con Claudia (Muñiz) en mis películas anteriores: fue coguionista en Marina (2012) y guionista en Jirafas (2013). Ella me propuso esta historia, que a mí me gustó desde el primer momento. Cuando comenzamos a trabajar solo hicimos una escaleta, porque para mí lo más importante era que las actrices prepararan sus propios personajes y los dotaran de sus experiencias”, comentó Álvarez en conferencia de prensa.
En este trabajo el director apostó por la improvisación para filmar. Kiki y Muñiz, intérprete y guionista del filme, solo confeccionaron una escaleta por la cual las actrices se guiaron para interpretar sus papeles.
“La improvisación fue muy importante. Solamente dos escenas con textos escritos, todas las demás las improvisamos en el momento. Para mí es la mejor manera de trabajar. Cada vez más entiendo que el cine es un arte colectivo en el cual cada uno aporta su talento. Creo que los actores tienen mucho que decir, y uno, como director, los coarta todo el tiempo. Cuando les das un espacio de confianza y realización todo fluye de una manera mucho más espontánea y natural. No tengo miedo trabajar de esta manera, porque luego en la edición seleccionamos las mejores tomas. Eso sí, en este tipo de trabajos es necesario generar mucho material, para tener de dónde escoger”, explicó el cineasta.
El realizador se mostró satisfecho de que su largometraje se haga acompañar en la cartelera por el animado El pastor de nubes (2015), de los jóvenes Ingrid Castellanos y Alejandro Santomé; y Últimos días de una casa (2015), documental de Lourdes de los Santos.
“El pastor de nubes me gustó mucho desde que lo vi por primera vez, así que se lo propuse al ICAIC para programarlo junto a Venecia. Es un material para adultos, una pieza inusual en el panorama de la animación en Cuba. Será una obra significativa que dará mucho de qué hablar; tiene una poética muy grande, habla de temas importantes.
"Con respecto al documental no puedo comentar mucho, porque no lo he visto, pero aprecio la obra de Lourdes, así que seguramente me gustaría. Estoy sumamente feliz de que acompañen a mi filme otros dos realizados por mujeres, porque Venecia es una película de mujeres. Me parece un excelente programa”.
Por su parte, la actriz Maribel García Garzón agregó que su trabajo en Venecia fue una experiencia muy rica. “Siempre digo que no fui consciente de que estaba haciendo una película, porque la libertad tan grande que teníamos las actrices era muy sabrosa para trabajar. No actué, solo viví momentos. Creo que esa manera de trabajar es la mayor ventaja. Por eso las personas se creen nuestros personajes, porque éramos nosotras mismas”.
Venecia es una película sui géneris en el contexto cubano, ya que fue financiada a través de crowfounding, una manera de recaudar dinero del público a través de Internet. Según comentó la productora del filme, Ivette Liang. “Fue una película muy compleja porque, a diferencia de Jirafas, tenía muchas locaciones”, apuntó.
El filme se completó gracias al Premio Nuestra América Primera Copia, que ganó en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano (FINCL). “Gracias a que ganamos en el festival de La Habana finalizamos la posproducción, en la cual nos apoyó también el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC)”, finalizó Liang.
La cinta se estrenó en el Festival de Toronto y luego en el Festival de La Habana. Su recorrido por los Estados Unidos ha incluido Miami, Tampa, Maryland, Minneapolis, Nueva York y Seattle. También estuvo en Guadalajara, donde las protagonistas se alzaron con el premio a Mejor actriz iberoamericana.
“Es una de las alegrías más grandes que nos ha dado la película, pues reconoce que el trabajo de ellas se apoya en las relaciones que establecen entre sí. Creo que es un reconocimiento a ellas y al modo en el que quisimos hacer la película”, reconoció Álvarez.
La próxima parada de Venecia será en Sicilia (Italia), en el Festival Taormina, donde se mostrará junto a otros filmes cubanos realizados de manera independiente. Según comentó el staff en conferencia de prensa, en lo que resta del año seguirá su periplo por diversos certámenes.
Finalmente, Álvarez comentó a la prensa sobre Buscando el deseo, su próxima película. “Ya estamos en fase de posproducción. Trabajamos con cerca de diez actores. Les pedí que se reunieran con nosotros en mi casa y llevaran una escaleta de un día cualquiera de sus vidas donde sucediera algo extraordinario. Reunimos todo el material y decidimos lo que queríamos filmar de cada actor. Utilizamos un proceso documental: trabajamos un día con cada uno, los filmamos en sus casas, con sus familias, pero con una puesta en escena. Cuando lo edite, lo haré como una película de ficción. Espero que funcione. Tenemos muy buen material, actores y no actores. No sé qué película va a ser, lo confieso”, confesó el director de La ola (1995).