Imperativa. Con la voluntad y a fuerza de una crítica aplastante hacia el abuso y el cinismo del poder. La segunda película del cineasta mexicano David Zonana es el resultado de una investigación previa, documental y también de campo, sobre la violencia dentro de las fuerzas armadas. En concreto dentro de los colegios militares de México. Afirma Zonana que la mayor parte de escenas que se encadenan en "Heroico" nacieron de los testimonios reales de excadetes. Con algunos de los sucesos relatados por los jóvenes a los que el cineasta entrevistó, y no con los casos más duros, Zonana ha hilvanado el armazón de un guion preciso que pone en escena con gran carga simbólica un mundo salvajemente monstruoso.

Lejos de caer en el retrato previsible o panfletario, la película de Zonana vuela mas allá de los clichés para retratar a unas fuerzas del orden corruptas que pudren todo a su alrededor. Así lo hacen con el propio Luis: el protagonista de dieciocho años que se ve obligado a alistarse, y más tarde a no poder desertar, debido al tratamiento que precisa la enfermedad de su madre (que solo con el seguro militar puede costear). Y es que la diferencia de clases es otro de los puntos fuertes que el film recorre mientras mezcla, por otra parte, el día a día con las cada vez más recurrentes pesadillas de Luis. Estas, que aumentan en ambigüedad y pulso cinematográfico firme según avanzan los abusos que el joven sufre por parte de su sargento al mando, terminan confundiéndose con la realidad. Especialmente la segunda mitad de la cinta merecería un análisis fílmico pormenorizado que daría fe de la profunda crítica de Zonana también hacia el estado mexicano y hacia las propias raíces del país. Crítica, también es cierto, extrapolable a nivel universal.

En "Heroico" sorprende el cruce entre un deliberado feísmo de la fotografía, que habla de lo duro de la historia relatada, y un estilizado uso del encuadre, que coloca a los cadetes casi siempre en un espectacular entorno de ruinas aztecas: la juventud alienada por el poder marchando sobre los restos de los sanguinarios ecos de la historia. En otra línea, también llama la atención la relación del joven Luis con las pocas mujeres que aparecen en la cinta. Pero esto merecería capítulo aparte.

Lo de Zonana es un cúmulo de aristas y buenas decisiones en forma de dedo acusador de una violencia brutal. La película se revela como un ensayo que alerta sobre la instrumentalización tan peligrosa que hace el poder de la masculinidad mal entendida, así como de la sociedad con menos recursos.